El artista callejero británico Banksy ha financiado un barco para rescatar a migrantes en el Mediterráneo. El barco en cuestión recibe el nombre de 'Louise Michel', un buque llamado así en honor a la anarquista feminista francesa, de color rosa chillón y con el dibujo de una niña con un chaleco salvavidas y un flotador con forma de corazón.

El 'Louise Michel' intenta llegar a Europa desde el norte de África, según puede revelar The Guardian. Ha sido precisamente este artista de arte urbano Banksy, del que se desconoce la verdadera identidad quien decidió financiar el barco que capitanea Pia Klemt, experta en otros barcos de rescate de ONG que han salvado miles de vidas en los últimos años.

El barco zarpó en secreto el 18 de agosto desde el puerto español de Burriana, cerca de València, y ahora se encuentra en el Mediterráneo central donde el jueves rescató a 89 personas en peligro, incluidas 14 mujeres y cuatro niños.

En estos momentos se encuentra buscando un puerto marítimo seguro para desembarcar a los pasajeros o trasladarlos a un buque guardacostas europeo. La tripulación, formada por activistas europeos con larga experiencia en operaciones de búsqueda y salvamento, ya había asistido en otras dos operaciones de salvamento en las que participaron un total de 105 personas, que ahora se encuentran a bordo del buque de la ONG Sea-Watch 4.

La historia del rescate

Su historia se remonta a septiembre de 2019 cuando Banksy contactó por correo electrónico a Pia Klemp, la excapitana de varios barcos de ONG que han rescatado a miles de personas en el mar en últimos años. "Hola, Pia. Soy un artista del Reino Unido y he hecho algunos trabajos sobre la crisis migratoria, obviamente no puedo quedarme con el dinero. ¿Podrías usarlo para comprar un barco nuevo o algo así? Por favor hágamelo saber. Bien hecho. Banksy", decía el email.

Según asegura Klemp al diario, cree que el artista callejero la eligió debido a su postura política, ya que no ve el rescate marítimo como una acción humanitaria, sino "como parte de una lucha antifascista". Bajo la bandera alemana, este barco de 31 metros y que fue propiedad de las autoridades aduaneras francesas, es más pequeño pero considerablemente más rápido que otros barcos de rescate, alcanzando una velocidad máxima de 27 nudos.