Los europeos responden a la exigencia de Putin de frenar la ayuda a Ucrania con la promesa de más armas
Los 27 líderes se reúnen en Bruselas en una nueva cumbre de seguridad y defensa. España pone resistencias al ‘Plan Kallas’.

Bruselas-
Corría el 2017 durante los primeros compases del mandato Donald Trump 1.0 cuando la por entonces canciller alemana Angela Merkel pronunció una de sus frases más recordadas: "Los europeos deben tomar el destino en sus propias manos". No ha sido hasta ahora, ocho años después, con el regreso del populista norteamericano, cuando los europeos han despertado. Y lo han hecho con todas las energías centradas en armar a Europa.
El lema "si queremos la paz, debemos estar preparados para la guerra" se instala en la capital comunitaria. Las divisiones sobre la ayuda a Ucrania y la nueva arquitectura de seguridad del Viejo Continente centrarán la cumbre que los Veintisiete celebrarán el jueves y viernes en Bruselas.
Ursula von der Leyen ha ido a lo largo de la semana calentando la cumbre europea de marzo, centrada –en línea con las últimas– en la seguridad y la defensa. "¿Seguimos reaccionando ante cada desafío de forma gradual y cautelosa? ¿O estamos dispuestos a aprovechar esta oportunidad para construir una Europa más segura? La respuesta es clara: no hay elección", se preguntaba la presidenta de la Comisión Europea desde Dinamarca.
Horas después, el Ejecutivo comunitario ha publicado decenas de documentos sobre su Libro Blanco de defensa, la Biblia militar que marca los distintos caminos y escenarios para consumar el rearme de Europa. Y se marca una fecha para lograrlo: el 2030.
Las diferentes propuestas capitaneadas por la ex ministra de Defensa de Merkel serán unos de los principales platos del menú de la cumbre europea, aunque no se espera que se adopten decisiones debido a que los Estados miembros necesitan más tiempo para estudiar y analizar los textos. Pero los Gobiernos nacionales ya van tomando posturas en el que está llamado a ser el debate de la presente legislatura europea.
El libro blanco de defensa se vertebra sobre el lema de Europa quiere la paz, pero debe estar preparada para la guerra y recoge elementos novedosos. Para movilizar los 800.000 millones de euros que ambiciona Bruselas se establecen dos caminos. Por un lado, la iniciativa SAFE que pondrá a disposición de los Estados miembros que lo deseen 150.000 millones de euros en préstamos financiados con deuda común y, por el otro, los presupuestos nacionales.
Para acceder al primero, la Comisión Europea impone una cláusula de Made in Europe. Es decir, el 65% de los componentes militares que se adquieran deben ser producidos en la UE, Islandia, Liechtenstein, Noruega o Ucrania. Se excluye, por ejemplo, a Estados Unidos. Bruselas se ofrece también a centralizar las compras conjuntas de armamento, en línea con lo que hizo durante la pandemia con la compra de vacunas.
Pero será complicado que los estados miembros le cedan este poder en una temática tan sensible como la seguridad. Y aquí surgen las primeras fricciones. Las peticiones de España para incluir subvenciones están siendo desoídas por el resto de socios. Y Países Bajos, que no pretende echar mano de este instrumento europeo, avisa de que continuará comprando a EEUU los cazas de combate F-35.
Desde Ámsterdam avisan de que la activación de la cláusula de escape –que pretende prolongarse durante los próximos cuatro años– para que los países se endeuden para comprar armas no debe en ningún caso poner en riesgo la estabilidad financiera de Europa.
La idea de las propuestas expuestas este miércoles en Bruselas es sellar la hoja de ruta para comprar drones, munición, misiles o artillería masivamente de forma consensuada y coordinada. También establece el apoyo al Ejército ucraniano y un plan para desplegar y movilizar tropas de forma rápida a lo largo de la Unión.
El discurso que se instala en Europa es el de que no estamos en guerra, pero tampoco en paz. "No tenemos una guerra fría. Pero sí una guerra caliente en el continente. Y la amenaza es existencial (...) Ucrania debe armarse para evitar los ataques presentes y futuros. Necesitamos un plan para resistir. Este plan tiene como objetivo encarar las amenazas inmediatas y construir una defensa europea a largo plazo. Así, ayudaremos a los EM a lograr sus objetivos de la OTAN. No hacemos esto para librar una batalla, sino para prepararnos para lo peor y defender la paz en Europa", aseguró Kaja Kallas, jefa de la diplomacia europea, en rueda de prensa.
"El orden internacional está sufriendo transformaciones de una envergadura sin precedentes desde 1945. En un momento crucial para la seguridad de Europa. Y es necesaria una inversión enorme", agregó la ex primer ministra estonia.
La tregua planea
La cumbre de líderes se celebra con un elefante en la habitación: las conversaciones recientes –primero entre Trump y Putin y después entre Trump y Zelenski– para acordar un alto al fuego temporal en Ucrania. Según recogen los medios rusos, algunas de las pre-condiciones establecidas por el inquilino del Kremlin miran directamente a la UE: exige que se levanten los 16 paquetes de sanciones y que concluya su ayuda militar a Kiev.
Los europeos responden a este órdago con un compromiso de enviar más armas. "Si [Putin] dice que debemos frenar el apoyo a Ucrania, lo que verá reflejado en las conclusiones de la cumbre será justamente lo contrario", afirma una fuente diplomática que resta importancia a la ausencia de representación europea en estas conversaciones.
Esta fuente asegura que la UE va a tener que jugar un papel debido precisamente a esa presión punitiva que ejerce sobre Moscú y a que es la seguridad de todo el continente la que está en juego.
Los 27 líderes abordarán también el Plan Kallas, que busca movilizar hasta 40.000 millones de euros para hacer la ayuda a Ucrania "predecible y sostenible". La Alta Representante y los países bálticos y del norte quieren que las contribuciones a este fondo se realicen de forma proporcional al PIB de cada país, pero esta fórmula genera rechazo en los sureños, especialmente en España e Italia.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.