Los buzos del Servicio de Guardacostas han recuperado en las últimas horas decenas de cuerpos de los inmigrantes subsaharianos que perdieron la vida el pasado jueves, cuando se hundió la embarcación en la que viajaban más de 500 hombres, mujeres y niños.

Durante la mañana del lunes se ha contabilizado un total de 195 cuerpos, según el diario italiano Il Fatto Quotidiano. En las tareas de rescate trabajan 40 buzos divididos en pequeños grupos que se turnan, ya que los restos del barco están a unos 47 metros de profundidad, por lo que cada buzo apenas puede estar abajo unos diez minutos, según informan los medios italianos. Tampoco el tiempo ayuda, con fuertes vientos y oleaje que obligaron a suspender las tareas de rescate durante la jornada del viernes.

Este domingo ha visitado Lampedusa la ministra de Integración, Cecile Kyenge, quien se reunió con varios de los supervivientes del naufragio. 'Estamos aquí para ayudar en esta enésima masacre, pero espero que no vuelva a ocurrir. Espero que sea la última vez que vengamos a Lampedusa para asistir a esta tragedia', ha declarado.

Para la ministra de Integración italiana es 'absurdo' que los supervivientes sean investidos por un delito de inmigración ilegal

Así, la ministra ha hecho un llamamiento a reflexionar sobre la posición de Italia, sobre las fronteras y el mar. Kyenge ha pedido que este 'drama' no se aborde únicamente desde el punto de vista de Italia, sino 'en conjunto con Europa'. Además ha calificado de 'sencillamente absurdo' que los supervivientes sean investigados por un delito de inmigración ilegal, en referencia a la conocida como ley Bossi-Fini que criminaliza a los inmigrantes, obliga a su deportación y les impone una multa de 5.000 euros a cada uno.

Kyenge ha denunciado además las condiciones 'vergonzosas' en las que son internados los inmigrantes en Lampedusa. En el centro de acogida con capacidad para 250 personas hay alrededor de un millar de personas internadas, incluidos los 155 supervivientes del naufragio del jueves. 

La muerte de cientos de inmigrantes en el naufragio frente a Lampedusa ha suscitado numerosas críticas hacia la política europea de inmigración y también contra Italia, con una legislación que desde 2002 considera culpables de un delito de complicidad a quienes introduzcan en el país a inmigrantes indocumentados, incluyendo a los que participen en tareas de ayuda a los barcos en los que viajan.

De la discusión que los ministros de Interior tendrán en Luxemburgo no se espera la adopción de ninguna medida concreta Los ministros de Interior de la Unión Europea (UE) abordarán el martes, a petición de Italia, la respuesta europea a la tragedia de este naufragio. Italia pide a la UE más solidaridad para afrontar la llegada masiva de refugiados, procedentes del norte de África y de otros lugares como Somalia y Eritrea, de donde eran los cerca de 500 inmigrantes indocumentados que el jueves se hundieron con su barco, frente a las costas de la isla de italiana de Lampedusa.

Sin embargo, de la discusión que los ministros de Interior tendrán en Luxemburgo no se espera la adopción de ninguna medida concreta, sino un llamamiento para prevenir futuras tragedias haciendo uso de instrumentos como Frontex o Eurosur para la vigilancia de fronteras, indicaron fuentes diplomáticas europeas.

La Comisión Europea (CE), además, considera 'inaceptable' decir que la UE no ha hecho nada o no lo suficiente para evitar tragedias como la de Lampedusa, y ha subrayado que las responsabilidades están claramente definidas y que sobre los Veintiocho recae el hacer más. 

El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Barroso, visitará el próximo miércoles la isla italiana de Lampedusa.'La visita se llevará a cabo en el espíritu de apoyo y solidaridad europea expresados por la Comisión a raíz de los trágicos acontecimientos de la semana pasada', informó el Ejecutivo comunitario.

Barroso expresa 'solidaridad y gratitud' hacia los habitantes de Lampedusa pero no propone medidas para lograr un cambio  Barroso rendirá homenaje a las 'numerosas víctimas que perdieron la vida trágicamente tratando de llegar a las costas europeas' y aprovechará para 'expresar su solidaridad y gratitud' a las autoridades y los habitantes de Lampedusa.

El suceso ha reabierto el debate sobre las políticas de inmigración llevadas a cabo en los países europeos y en la Unión Europea en su conjunto.La Comisión Europea aseguró que 'dentro de sus competencias y recursos, sigue plenamente comprometida a trabajar en nuevas medidas y acciones concretas que se pueden tomar a nivel europeo y nacional para hacer frente a la difícil situación de los refugiados'.