Que hoy falten 25.000 médicos de familia preocupa. Pero que ese dato pueda aumentar hasta una cifra insospechada en los próximos diez años -como advierten los profesionales - obliga, como mínimo, a poner sobre la mesa un remedio inmediato.

Eso es lo que piden los médicos de atención primaria a Sanidad: 'Mejorar las condiciones económicas para que vuelvan los [aproximadamente 6.000] médicos que se han ido a países como Portugal [donde cobran unos 20.000 euros más], porque no se van por gusto'.

Así respondió ayer a Público Manuel Jiménez de la Cruz, presidente del Comité Organizador del XXIX Congreso Nacional de Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, Semergen, clausurado ayer en Bollullos de la Mitación (Sevilla) por el ministro de Sanidad, Bernat Soria.

Para Jiménez de la Cruz, 'los médicos de familia deberían estar mejor pagados porque su responsabilidad es altísima'. Y esa mejora económica, en su opinión, es la que salvaría a la sanidad española de la espiral en la que acaba de entrar: 'Tenemos que esperar diez años a que salga una nueva hornada de médicos; habrá también miles de médicos que se jubilen; y en esa década aumentará la población que necesite de la atención primaria'. El resultado es claro: un sistema sanitario raquítico.

Los deberes

De momento, el ministro no habló ayer de subir salarios ni valoró cifras concretas de déficit, pero sí volvió a culpar al PP -esta vez implícitamente- de la falta de médicos e insistió en su compromiso por solventarlo con medidas como más plazas MIR, la homologación de títulos extranjeros, la aprobación de una 'composición razonable de las especialidades' y de una 'distribución geográfica equilibrada de los recursos'. Éstos son ahora los deberes de Soria, que no quiso volverse a Madrid sin dejar los suyos a los médicos en Sevilla: 'Tendréis que adecuaros a los nuevos tiempos porque es la única manera de seguir avanzando, de mantener la posición que la atención primaria española ocupa en Europa', dijo. Eso sí, no faltaron halagos: 'Sois los responsables de la alta calificación de nuestra sanidad'.