Ni tribuna ni baño de masas. El lehendakari, Patxi López, aprovechó ayer la ventana social Irekia y la red Twitter para difundir sus mensajes en respuesta a preguntas de los ciudadanos. En una intervención de media hora contestó a preguntas acerca del nuevo código ético presentado por su Gobierno. Sus miembros y los altos cargos del sector público tendrán 15 días para adherirse de forma voluntaria a dicho código, mostrar así su 'honestidad' y tratar de recuperar la confianza de la ciudadanía ante el creciente desapego con la clase política y los 'casos de corrupción'. Una medida, quiso recordar López, que forma parte de los compromisos adquiridos al inicio de la legislatura para que su Ejecutivo tuviera 'bolsillos de cristal'.

El lehendakari también tuvo ocasión de emplazar directamente a Bildu a aclarar su 'propuesta' política después de que un expreso de ETA mostrara una pancarta en la que pedía el voto para la coalición abertzale tras su salida de prisión.

Barreda: 'Cospedal es como Sarah Palin. Tiene presencia, pero poco fondo'

'Es una muy buena oportunidad para que Bildu y, sobre todo, Eusko Alkartasuna y Alternatiba, nos digan si esa es su propuesta, la de no renunciar al pasado, la de no rechazar los crímenes cometidos y la de no arrepentirse por la violencia y el sufrimiento que algunos han provocado en este país', explicó.

Mientras tanto, el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, insistía en su mensaje sobre el pacto de legislatura en Euskadi entre el PSE y el Partido Popular vasco, después de que el líder conservador, Antonio Basagoiti, lo ratificara pese a la polémica que enfrenta a socialistas y conservadores en Madrid sobre Bildu. A juicio de Urkullu, transcurridos los primeros cinco días de campaña electoral, se ha vuelto a demostrar que el pacto PSE-PP 'está más sólido que nunca' y 'no tienen ni una sola fisura ni mucho menos línea roja' alguna, al menos política, a la vista', informa Guillermo Malaina.

Belloch anuncia en Zaragoza créditos de hasta 15.000 euros para los autónomos

'Me recuerda a Sarah Palin'. Lo afirmó ayer José María Barreda, el presidente castellano-manchego, sobre la candidata del PP a la Presidencia de la Junta de esta comunidad, María Dolores de Cospedal. Ni tiene moño ni gafas ni es morena, pero no se trata sólo de su aspecto físico. Barreda comparó a la secretaria general del PP con la política conservadora norteamericana por su 'buena presencia, ser muy agresiva' y tener 'poco fondo'. Horas después, reiteró sus palabras en una entrevista en la cadena COPE. Y argumentó su comparación afirmando, entre otras cosas, que la conservadora dice 'evidencias sin ninguna profundidad'.

Durante un encuentro en Ciudad Real, el candidato socialista recriminó además a Cospedal que sea 'pura fachada' y no vaya a mantener un debate con él en televisión.

El PP de Aguirre presenta una querella contra Tomás Gómez

El PP de Castilla-La Mancha, en boca de su secretario general, Vicente Tirado, calificó las declaraciones de Barreda de 'groseras y machistas' y pidió al presidente de la Junta que retirara sus palabras.

Las reacciones sobre el choque que protagonizaron ayer la ministra de Defensa, Carme Chacón, y Dolores de Cospedal en Tomelloso (Ciudad Real) también centraron el quinto día de campaña. Cospedal recomendó a Chacón que 'se deje de tantas campañas de promoción personal' y se dedique a hacer propuestas, en alusión a la posibilidad de que la ministra se presente a las primarias del PSOE.

Barreda sigue prefiriendo celebrar dos actos en un solo día a coincidir con otros dirigentes socialistas. Este volvió a ser el argumento del presidente de la Junta para justificar su ausencia en el mitin que protagonizó el lunes en Tomelloso la ministra de Defensa. Carme Chacón, añadió, no necesita de su participación para ser eficaz en un acto de campaña: 'Tiene potencia evidente y capacidad de atracción' para llenar cualquier recinto.

Jorge Alarte denuncia los escándalos judiciales del PP valenciano

Uno de los principales escenarios de la disputa electoral en Aragón es la alcaldía de Zaragoza. Los candidatos de los dos partidos más votados (PSOE y PP) cargaron ayer sus mensajes de promesas en materia económica para sumar votos el 22-M. El regidor de esta localidad y candidato socialista a la reelección, Juan Alberto Belloch, anunció que, en caso de mantenerse como alcalde, creará una entidad que negociará microcréditos de hasta 15.000 euros con los bancos para garantizar la solvencia de las empresas de autónomos que sean viables. El consistorio avalará esos créditos con patrimonio, por valor de tres millones de euros.

El candidato conservador en Zaragoza, Eloy Suárez, centró su intervención en el comercio para acabar con el 'cierre de persianas' y mantener el empleo. Suárez criticó que, pese a la subida del IVA, Belloch no hubiera aumentado las ayudas a los comerciantes.

Hubo más promesas. Rosa Santos, candidata del PAR, se comprometió a pagar 'de inmediato' a los proveedores el dinero que les debe el consistorio. A su juicio, estos impagos 'desestabilizan' la economía local y perjudican el empleo.

Arenas no respeta la Ley Electoral que propone ni en su propio pueblo

Después de una comparecencia en la que detalló la presunta corrupción del PP valenciano, y del anuncio solemne de que con él llegará la transparencia a la Generalitat, el candidato socialista Jorge Alarte dejó escapar una justificación que nadie le había pedido: 'No les hemos convocado para regodearnos en lo que ya saben porque para depresión, negror y tristeza, ya está [Francisco] Camps. Nosotros les hemos convocado para decirles que se puede gobernar de otra manera'. La frase, con la que Alarte parecía estar pidiendo perdón por ocuparse un día más de los defectos del contrario en vez de destacar los méritos propios, refleja la indecisión que marca los actos de la campaña electoral del PSPV.

A la hora de escribir el discurso de los mítines y de subirse al escenario, a los socialistas valencianos les puede más la indignación y la convicción de que podrán ganarse al votante del PP a fuerza de situar una y otra vez en el candelero los escándalos judiciales que afectan a sus dirigentes. Surge entonces el otro gran mensaje de la campaña: la denuncia de la presunta corrupción del PP valenciano, en un intento de explicar a los ciudadanos que, según se desprende de la investigación judicial, les han estado robando dinero público en los últimos seis años, informa Belén Toledo.

El PP de Madrid celebró ayer actos de campaña en la Plaza de los Jardinillos de Majadahonda, en el Centro Cívico Municipal La Serna de Fuenlabrada, en Getafe, en Humanes y... en la Plaza de Castilla.

Hasta este último emplazamiento, sede de los Juzgados de Instrucción, se desplazó el secretario general del PP de Madrid, Francisco Granados, para interponer una querella criminal por un delito de calumnias contra el secretario general del PSM y rival de Esperanza Aguirre en estas elecciones.

El partido intentó hacer todo lo posible para desvincular esta iniciativa de los actos de campaña. Pero fue difícil. Quizá porque Francisco Granados es también el jefe de campaña de Aguirre. O porque la denuncia tiene su origen en una acusación que Tomás Gómez vertió contra la candidata conservadora el domingo por la noche en el debate que mantuvieron en Telemadrid: la de que el Ejecutivo regional vende el Canal de Isabel II, hospitales y colegios a sus amigos. Lo cierto es que a las puertas de los juzgados no había banderolas azules del PP, ni fotos de su cabeza de lista. Tampoco sonaba el himno del PP. Pero se barruntaba cierto soniquete electoral.

'Se está imputando un delito de prevaricación y tráfico de influencias y eso se llama en el Código Penal calumnia', consideró Granados tras asegurar que además de en el debate, Gómez, 'sin ningún tipo de rubor', imputa 'de forma reiterada' estos delitos a la Comunidad de Madrid 'en sus cuñas publicitarias y en sus declaraciones'. 'Nosotros defenderemos nuestros derechos y cortaremos el espectáculo bochornoso cuando de manera impune se trata de trasladar una imagen de que el Gobierno regional delinque. No lo podemos consentir. Cuanto antes hay que cortar esta espiral', informa Yolanda González.

Como si fueran dos viejos amigos que han perdido el contacto y uno de ellos se molesta porque el otro visita su ciudad y no le avisa. 'Los políticos se transforman y ni te piden anchoas', ironizó Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria y candidato regionalista a la reelección. Este lamentó que el presidente Zapatero fuera a Santander a participar en un acto electoral y no se hubiera puesto en contacto, mientras que él, siempre que se desplaza a otra comunidad autónoma, sí intenta comunicarse con los presidentes regionales. Revilla achacó la actitud de Zapatero a la proximidad de las elecciones. En su opinión, es un periodo de 'confrontación' en el que 'la gente es irreconocible' y 'se transforma completamente'.

'Una persona amorfa' cuya 'credibilidad es cero', por lo que 'no le presto mucha atención'. Esta fue la respuesta del presidente del Cabildo de Tenerife y candidato de Coalición Canaria, Ricardo Melchior, a las críticas que hizo Mariano Rajoy a los nacionalistas canarios en un mitin el lunes en esa localidad.

'Está dos horas y nos quiere enseñar un montón de cosas', afirmó Melchior en relación a las declaraciones del líder del PP, quien aseguró que el papel de los nacionalistas se estudiará en 'los libros de historia' porque ha sido 'antológico'. El regidor excusó las afirmaciones de Rajoy diciendo que 'vendría mareado del vuelo'. 'Lo mejor era mandarlo a Australia para que no diga disparates', añadió.

A Mar Moreno, consejera de Presidencia de Andalucía (PSOE), le sucedió ayer lo que a los forofos de un equipo de fútbol cuando el contrario mete un gol en su propia portería, que se tronchan. 'Esta tarde [por ayer] voy a Olvera, el pueblo del señor Arenas. Y allí, cualquiera que lo escuche pedir que gobierne la lista más votada, tiene que alucinar y pensar que es un cínico', dijo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. En Olvera (Cádiz) ganó el PSOE en las elecciones de 2007 con seis concejales, pero gobierna IU, que sacó cuatro, con el apoyo del PP, que obtuvo tres, y evitó con sus votos que los socialistas gobernasen en el pueblo natal del presidente de su partido. 'Arenas no respeta la lista más votada ni siquiera en su pueblo', soltó Moreno.

Arenas, que volvió ayer a plantear su vieja reivindicación de que los partidos respeten la lista más votada, se topó con la contundente respuesta de Moreno. El líder del PP andaluz propuso a PSOE e IU un pacto ante notario para que en los ayuntamientos gobierne el que gane y el que pierda 'vaya a la oposición', lo que, a su juicio, contribuiría a que la ciudadanía recuperase la fe en la política. Pero es que un día antes incluso se comprometió a reformar la Ley Electoral de Andalucía.

El PP no predica con el ejemplo. Arenas no hizo referencia alguna a Olvera, pero tampoco a San Fernando (Cádiz) ni a La Carolina (Jaén), ni a Priego de Córdoba, sitios en los que el PP no ha respetado la lista más votada, la socialista, informa Raúl Bocanegra.