CiU y ERC acogieron ayer con ánimo entusiasta una propuesta del Centre d'Estudis Sobiranistes para que la ley de consultas que el Estatut permite sea de máximos. La norma fomentará, según fuentes del ejecutivo catalán, 'una cultura democrática asociada a los referéndums, que se podrían hacer coincidir con las elecciones para fomentar la participación'.

Sectores de CiU y ERC plantean la ley como un instrumento para avanzar, a medio plazo, hacía un referéndum autodeterminista que, por ahora, sería ilegal.

La norma que se prepara para este año estará dentro de la legalidad (Constitución y Estatut) pero se hará con ambición y para 'habituar a la ciudadanía a pronunciarse' sin que eso sea un hecho extraordinario.

La Generalitat quiere que, por ejemplo, se puedan consultar asuntos como la financiación autonómica o las selecciones deportivas. 'Y después, con refrendo popular, que el gobierno del Estado diga que no', afirman apuntando hacia el choque de legitimidades.

El Cercle, un think tank independentista que dirigen el vocal del CGPJ Alfons López Tena y el profesor de derecho constitucional Héctor López Bofill, ha elaborado un informe jurídico de las potencialidades de los artículos 29 y 122 del Estatut, que no están impugnados en el TC, y dan a la Generalitat competencias para organizar las consultas siempre que Madrid lo autorice.

El informe cuenta, además de las de Tena y Bofill, con aportaciones de Montserrat Gibernau, catedrática del Qeeen Mary College de Londres, Ferran Requejo, catedrático de ciencia política de la UPF y el exconseller de Justicia Agustí Bassols entre otros. El documento fue librado ayer a Artur Mas, de CiU, y a Josep-Lluís Carod-Rovira, de ERC.

También lo recibió el conseller de Gobernación Joan Puigcercós, de Esquerra, cuyo departamento recibió el mandato de redactar el anteproyecto. Puigcercós asumirá en su práctica totalidad el documento.

Tena y Bofill proponen, entre otras medidas, que con entre 150.000 y 200.000 firmas (a medio camino entre las requeridas para una Iniciativa legislativa popular y el 5% del censo catalán) la Generalitat y el Parlament no puedan vetar un referéndum. Es una forma, afirman, de combatir la desafección política. La propuesta presenta las consultas como vinculantes y las extiende también a competencias estatales en que la Generalitat tenga capacidad de propuesta.

CiU y ERC consideraron 'escupuloso' el documento 'surgido de la sociedad civil' e hicieron votos por su buena acogida. Los dos grupos tienen mayoría en el Parlament pero los republicanos buscarán sumar al PSC e ICV-EUiA

Una entidad ‘ad hoc’ para rehacer los puentes

El Cercle es una entidad de creciente prestigio creada recientemente por López Tena -militante de CDC- y López Bofill -vinculado a ERC- Actúa de ‘think tank' pero su objetivo último es acumular fuerzas para un proceso soberanista en Catalunya. Según entienden sus promotores este acabaría pasando por rehacer los puentes volados por los tripartitos entre CiU y ERC, las dos fuerzas políticas del nacionalismo que, de una u otra forma, apuestan por el derecho a decidir.