Por Marcelo Berenstein

Quien haya escuchado o visto las noticias de este mes, es muy probable que a primera vista la reacción sea de ansiedad, e incluso miedo. La segunda fuerte caída que atraviesan las monedas virtuales, el conflicto que aún no cesa entre Ucrania y Rusia, y ahora último, la incipiente caída de las acciones de empresas tecnológicas, ciertamente nos hace prever un futuro inestable.

Sin embargo, el saber popular respecto a que muchas fortunas se construyen en los momentos de agudas crisis sigue siendo válido hasta hoy.

Si eres de las personas a las que les está rondando la idea de invertir en trading de Forex, este artículo no te lo puedes perder.

Trascender la sobre y sub reacción

En contextos como el descrito antes, es muy común que quienes invierten se vuelvan extremadamente pesimistas durante las recesiones, esto es lo que se llama como subreacción. Pero, también ocurre lo contrario: es muy frecuente que los inversionistas se vuelvan optimistas cuando el mercado está en alza, a tal punto que, asumen que seguirá así por la eternidad.

De esta forma, en la cúspide del pesimismo, los precios del mercado caen demasiado ante las malas noticias, y a la inversa, en la cúspide el optimismo la ambición de quien invierten mueve el mercado más allá de sus valores históricos.

Sea que haya una excesiva reacción o una insuficiente reacción, como es lo que ocurre por estos días, esto provoca la sensación de pánico y colapso del mercado. Por eso, es importantísimo, no paralizarse, pero sí, parar a analizar qué inversión realizar.

La volatilidad como factor

Comenzamos este artículo hablando de las criptomonedas y su reciente caída. Lo cierto es que la inversión dentro de este mercado siempre estuvo marcado por una alta volatilidad, lo que implica también que es una operación de un alto riesgo que se debe sopesar antes de iniciar.

En tanto, el mercado Forex también se caracteriza por dicha volatilidad, sobre todo cuando se negocia con monedas que están por fuera de las más comercializadas o cuando se opera en medio de momentos de altas expectativas económicas. Por ejemplo, el par USD/EUR se ha movido con frecuencia en las últimas semanas.

Ahora bien, Forex es un mercado en el que la volatilidad bien aprendida y aplicada puede terminar siendo favorable para el inversor, ya que a partir de ella logra obtener ganancias. Por supuesto, para poder sacar rédito de este riesgo es necesario contar con formación previa y una estrategia sólida.

Al operar a la baja o al alza de una moneda en momentos de alta volatilidad, se debe estar al tanto de todas las novedades económicas y políticas que puedan impactar en el valor de ese par de divisas. En momentos de desajuste económico, los cambios pueden ser mucho más fuertes de lo que esperábamos.

Así entonces, Forex puede sacarle una cabeza de ventaja a las criptomonedas en a la hora de invertir en este contexto volátil. Después de todo, las divisas como Bitcoin o Ethereum están marcadas por un cambio constante de valor, así como el riesgo constante de cambios en las políticas intervencionistas de los gobiernos u organismos internacionales.

Contratar un corredor o bróker

Tras analizar las variadas opciones de inversión y habiendo tomado la decisión de invertir en trading de Forex, el siguiente paso es buscar plataformas de corredores o como comúnmente se les denomina: ‘broker’.

En esta etapa, lo mejor será tomarse el tiempo para buscar un broker confiable. Es decir, que sea regulado por las máximas autoridades competentes, y cuente con reconocimiento y licencia en todo el mundo. Dentro de las sugerencias sobre cómo elegir un buen corredor de forex, destacan: revisar bien desde cuándo comenzó a operar, qué tan respaldado se encuentra en base a los comentarios en redes sociales y otras fuentes.

En esta etapa, suele pasar que quien inicia este camino se guía mucho por los comentarios de sus más cercanos, amistades o familiares. Si bien esto es muy válido porque son las personas en que normalmente más se confía, es muy importante la búsqueda de información que ayuda a corroborar lo que nos dicen, pues muchas veces hablamos de un asunto, teniendo solo pinceladas de lo que trata.

Gestionar los posibles riesgos

Así como hemos hecho hincapié en el factor de la volatilidad, cuando se habla de gestionar los posibles riesgos es indudable que se está hablando también de la gestión de las expectativas.

Siempre se dice que para comenzar a invertir es mejor hacerlo en pequeños montos, hasta ganar mayor conocimiento sobre la experiencia, y no solo quedarse con los de la teoría. En este sentido, muchos inversionistas, sin ánimo de endeudarse o sabiendo que podrán solventar esa deuda en caso de perder, optan por operar cfds en AvaTrade, por ejemplo.

La gestión de expectativas, en simples palabras refiere a los sueños u objetivos que toda persona tiene a corto y largo plazo. Y, en consecuencia, la gestión de riesgos nos habla sobre los posibles costos que podría traer el usar diferentes tipos de medios o estrategias para alcanzar esos sueño u objetivos.

De allí que, los riesgos que cada uno elige deben siempre ajustarse al contexto financiero real que se tiene, pues sólo a partir de allí, los sueños u objetivos pueden construirse de manera clara.