Este artículo se publicó hace 2 años.
La AIE alerta de que los recortes de petróleo de la OPEP+ amenazan con llevar la economía global a la recesión
Arabia Saudita defiende la medida frente a las críticas de EEUU, que teme que la decisión de los países productores eleve el precio de la gasolina en puertas de las elecciones legislativas de mitad de mandato de noviembre.
Londres/Cairo--Actualizado a
La decisión adoptada la semana pasada por el grupo de productores de petróleo La OPEP+, el grupo de productores formado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) más sus aliados, incluida Rusia, para recortar su objetivo de producción en 2 millones de barriles diarios ha hecho subir los precios y podría llevar a la economía mundial a la recesión, según declaró el jueves la Agencia Internacional de la Energía, vinculada a la OCDE.
"El incesante deterioro de la economía y el aumento de los precios provocado por el plan de la OPEP+ de recortar la oferta están frenando la demanda mundial de petróleo", afirmó la agencia con sede en París, que incluye a Estados Unidos y otros países grandes consumidores.
"Con las incesantes presiones inflacionistas y las subidas de los tipos de interés, el aumento de los precios del petróleo puede ser el punto de inflexión de una economía mundial que ya está al borde de la recesión", añadió en su informe mensual sobre el petróleo.
Las pérdidas reales de abastecimiento serán probablemente de alrededor de 1 millón de barriles diarios y no de los 2 millones de barriles anunciados por el bloque OPEP+, que reúne al club de productores y a aliados como Rusia, según la AIE.
Las limitaciones de capacidad que afectan a la producción de otros miembros de la OPEP significan que Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos aportarán la mayor parte de las reducciones, según la AIE, mientras que las nuevas sanciones del G7 y de la Unión Europea a Rusia podrían restringir aún más la oferta mundial.
La advertencia de la agencia pone de manifiesto las desavenencias con Arabia Saudí, primer exportador mundial de petróleo y líder de facto de la OPEP. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió "consecuencias" no especificadas para las relaciones con Arabia Saudita tras la medida de la OPEP.
El recorte de la OPEP+ ha suscitado la preocupación en Washington por la posibilidad de que suban los precios de la gasolina de cara a las elecciones de mitad de mandato de noviembre en Estados Unidos, en las que los demócratas intentarán mantener su control de la Cámara de Representantes y el Senado.
Estados Unidos acusó a Arabia Saudita de doblegarse ante Moscú, que se opone a un tope occidental en el precio del petróleo ruso en respuesta a su invasión de Ucrania.
Riad rechazó las críticas y dijo que la medida no era política y tenía como objetivo equilibrar el mercado y frenar la volatilidad. La decisión de la OPEP+ se adoptó por consenso, tuvo en cuenta el equilibrio de la oferta y la demanda y buscó frenar la volatilidad del mercado, dijo el jueves el Ministerio de Asuntos Exteriores saudí en un comunicado.
El comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores saudí del jueves se refería a las consultas con Estados Unidos antes de la reunión de la OPEP+ del 5 de octubre, en la que se le pidió que retrasara los recortes un mes. "El Reino aclaró, a través de sus continuas consultas con el Gobierno estadounidense, que todos los análisis económicos indican que posponer la decisión de la OPEP+ un mes, de acuerdo con lo que se ha sugerido, habría tenido consecuencias económicas negativas", decía el comunicado del ministerio de Exteriores saudí.
El comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores saudí, que cita a un responsable no identificado, subraya el "contexto puramente económico" del recorte del petróleo. También dijo que el reino considera su relación con Estados Unidos como "estratégica" y subrayó la importancia del respeto mutuo.
El Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico emitió una declaración en apoyo a los comentarios de Arabia Saudita en la que elogiaba los esfuerzos del reino por proteger al mercado de la volatilidad.
Este mes, la UE respaldó un plan del club de naciones ricas del G7 para imponer un tope a los precios de las exportaciones de petróleo ruso, un complejo conjunto de nuevas sanciones mundiales destinadas a privar a Moscú de ingresos por su invasión de Ucrania. Sin embargo, cualquier interrupción importante de los flujos de petróleo ruso, incluso para los compradores que no pertenecen a la UE ni al G7, podría elevar los precios en todo el mundo y perjudicar económicamente a los ciudadanos de los países sancionados, que ya están lidiando con la alta inflación y el coste de la vida.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.