El Rayo cedió un punto en su propio feudo ante el Cádiz (2-2) en un partido marcado por la falta de ideas. Los andaluces, mejor asentados sobre el campo, maniataron perfectamente a los hombres clave de Mel, que se vieron impotentes e inoperantes ante el marco contrario.

No pudieron los vallecanos que, desdibujados durante todo el partido, obtuvieron más botín del merecido ante un Cádiz mejor tácticamente, al que está claro que le falta el hábito de ganar, lo contrario precisamente de lo que le ocurre a los madrileños. Dos jugadas rayistas de gran valor técnico fueron suficientes para lograr sendos goles. Los gaditanos necesitaron en cambio media docena de ocasiones para lograr el mismo rendimiento anotador.

Solo Rubén Castro volvió a hacer de las suyas. Con potencia y habilidad, cuando parecía que iba a caer desequilibrado, logró zafarse de la defensa para conseguir su sexto gol consecutivo de la temporada. El problema es que el delantero franjirrojo necesita de suministro de balones para ejercer su función.

Y este sábado el Rayo estaba en otra cosa, tal vez contagiado por el ambiente de hermandad reinante en las gradas. Ni Jofre por izquierda, excesivamente fallón, ni Quero por derecha eran capaces de ofrecer nada potable arriba que rematar. Solo Míchel, autor del segundo tanto madrileño, era capaz de poner alguna gota de sentido común. Poco bagaje.

El equipo amarillo, mejor técnicamente, mereció ganar

Así las cosas, el Cádiz fue capaz incluso de poner más empeño e irse a por el partido, con un Ogbeche acertadísimo en el remate (los dos goles fueron suyos), incluso en acrobáticas jugadas de chilena. Al final, reparto de puntos, y el Rayo sigue durmiendo en puestos de ascenso.

Tampoco pudo el Cartagena vencer al Celta en su casa, ante un equipo situado en puestos de descenso. Su empate (1-1) le permite, eso sí, ocupar momentáneamente el liderato en la clasificación.

El Cartagena, que no pudo con el Celta (1-1), durmió como líder

En cambio, el farolillo rojo lo sigue ostentando el Castellón, ha pesar de haber conseguido su primera victoria de la temporada, coincidente con el debut en el banquillo de Tintín Márquez. Ha sido ante el Betis (1-0), aunque para ello fuese necesario que Emaná marcase en su propia portería. Tres empates consecutivos de los béticos, y ahora esta derrota, empiezan a levantar sombras de dudas a orillas del Guadalquivir.