El Comité de Disciplina de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha sancionado al Atlético de Madrid con el cierre parcial de su estadio durante tres partidos por los graves incidentes que se prodjeron durante el derbi de la jornada octava de Liga ante el Real Madrid, y que fue suspendido temporalmente por el lanzamiento de objetos.

Según informó la RFEF, el cierre afectará a parte de la grada baja fondo sur, sectores 127 a 133, desde la que se hicieron los lanzamientos a la zona donde estaba el portero madridista, el belga Thibaut Courtois. El Comité también multa al club con 45.000 euros por "infracciones muy graves".

"Aunque se trate de la acción de una parte nada representativa de los aficionados del club, por parte del Atlético de Madrid no se adoptaron las medidas suficientes para prevenir unos incidentes tan graves en la propia acción multitudinaria y en su resultado o, cuando menos, las medidas que se adoptaron no fueron las idóneas para un partido de especial rivalidad de una competición profesional de primer nivel como es la Primera División de una de las ligas más importantes del mundo", dice el Comité en su resolución.

Relato de los hechos

Los hechos se desencadenaron hacia el minuto 68 de partido, justo después de que el Real Madrid se adelantara en el marcador por medio de Eder Militao. Antes de que el árbitro del encuentro, Busquets Ferrer, pudiera reanudar el partido desde el centro del campo, Courtois le hizo entrega de varios mecheros que había recogido del césped y lanzados por individuos en el fondo justo detrás de su portería. El guardameta también apartó una botella de agua y otros objetos. 

Tras advertir por megafonía de la prohibición de lanzar objetos y volver a recibir mecheros, a la tercera ocasión el árbitro decidió suspender el choque de forma temporal. Tras mandar a los vestuarios a los equipos, algunos jugadores del Atlético y el técnico Simeone se acercaron al fondo, donde se podía ver a varios hinchas con pasamontañas, para intentar calmar los ánimos. 

En declaraciones posteriores, Simeone y algún jugador como Koke señalaron que tampoco ayudaron los gestos de Courtois hacia la grada. Por su parte, la Liga recogió insultos como "Courtois, muérete" o "madridistas hijos de puta".