Los sindicatos impulsarán una iniciativa popular contra la reforma laboral

Comisiones Obreras y UGT  planean impulsar una iniciativa legislativa popular para cambiar la reforma laboral aprobada por el Congreso de los Diputados, ya que, según los sindicatos, no han supuesto una reducción del desempleo. Además, y según explica UGT en un comunicado tras la reunión de su Comisión Ejecutiva Federal, ambos sindicatos han advertido de que se están planificando nuevas movilizaciones contra las políticas de ajuste impuestas por la Unión Europea.

UGT subraya que el principal objetivo de la política económica debe ser reactivar el crecimiento económico "sostenido, duradero y equilibrado". Por eso, ambas organizaciones presentarán diversas propuestas que ya hicieron saber al Gobierno con anterioridad pero que no han sido tenidas en cuenta.

Entre ellas destacan la de recuperar el diálogo social con las administraciones públicas "para revisar los recortes salariales y la tasa de reposición de empleo público", así como retirar la congelación de las pensiones, recuperar el Pacto de Toledo y no elevar a los 67 años la edad de jubilación, como propone el Ejecutivo. En este sentido, consideran que se debe garantizar el sistema de pensiones por la vía del aumento de los ingresos y no del recorte de gastos.

Los sindicatos recogerán firmas para impulsar una iniciativa legislativa popular

También reclaman potenciar los sectores con futuro y de mayor valor añadido; empleo de calidad y formación para los desempleados y los trabajadores en activo, así como mejorar la protección por desempleo. Además, subrayan la necesidad de rectificar la Ley de Cajas y restaurar la liquidez a empresas, familias y autónomos.

Los sindicatos pedirán por otra parte una reforma fiscal que otorgue mayor progresividad con la recuperación de algunas figuras tributarias, y una mayor lucha contra el fraude fiscal.

La Comisión Ejecutiva Federal de UGT ha empezado a preparar la promoción de la citada iniciativa legislativa popular, que requiere la recogida de al menos medio millón de firmas para conseguir que el Congreso tome en consideración la propuesta. Para impulsarla, los sindicatos pedirán la colaboración de las organizaciones sociales que respaldaron la huelga.