El secreto de los hongos

La voluntad de dar a conocer "el mágico mundo de la micología" y un premio a la innovación hicieron realidad Hifas da Terra. La bióloga y gerente de la empresa, Catalina Fernández de Ana, es artífice de una idea que nació en 1999 como un proyecto de fin de carrera destinado a "hacer perder el miedo" a los hongos y que arrancó con la comercialización de setas ecológicas y kits de producción caseros: pequeños sacos en los que al cabo de unos días brotaban champiñones aptos para el consumo. "Estos cultivos permiten seguir el desarrollo de las setas, desde que brotan y tienen el tamaño de la cabeza de un alfiler, hasta que son grandes y se pueden cortar. Es como tener lechugas en la terraza de casa", bromea. "Desde el primer momento, me limité a investigar aquello que había visto toda la vida en la finca familiar, porque lo que siempre he querido es acercar la micología a la gente", añade.

El estudio de los hongos derivó en el cultivo ecológico de las distintas variedades, la selección de las mejores cepas, procedentes de puntos dispares del planeta para su cultivo posterior en el sur de Galicia. La demanda, según Fernández de Ana, llevó a la firma a iniciarse hace cinco años en una nueva área de negocio: la del extractado y encapsulado de diferentes variedades de setas, que aportan beneficios para la salud. "Los hongos tienen propiedades inmunorreguladoras que permiten estabilizar los ciclos por los que pasa nuestro organismo y que se hacen patentes cuando nos ponemos enfermos". Y es así como Hifas da Terra comenzó a desarrollar complementos nutricionales dirigidos a aumentar las defensas, puesto que de otra forma "habría que comer muchas setas" para que los beneficios fueran palpables. "Trabajamos con setas medicinales y seguimos procedimientos científicos avalados". Esta área de la empresa está dirigida "a médicos, naturópatas y farmacias". Tratamientos naturales "sin efectos secundarios", según puntualiza Fernández de Ana, con una gran aceptación en países como "Francia, Italia, Grecia o Nueva Zelanda", donde ya están presentes, pero "más lenta" en España, según reconoce la bióloga. "Tomar vitaminas en el desayuno como se hace desde hace años en EEUU aquí era impensable antes, aunque cada vez es más común".

Las setas tienen propiedades inmunorreguladoras para el organismo

Dado que la preocupación por la salud es inconcebible en un entorno degradado, otra pata productiva básica de la empresa gallega es el vivero. Un área de negocio dirigida a pequeñas y medianas empresas, pero también a propietarios de suelo forestal. "Reproducimos y vendemos árboles seleccionados, multiplicados a partir de variedades superiores con las que se puede obtener una mayor producción de fruto, de madera y de setas". El resultado son castaños "de fruto selecto" productores de champiñones y unos bosques de frondosas que permiten "plantaciones muy rentables por su madera noble" y que contribuyen a "embellecer" el paisaje. "Estos espacios hacen que la gente, que necesita estar en espacios abiertos, salga de las ciudades y vaya al bosque". Precisamente, el goteo continuo de visitas inesperadas al "jardín de micología", que es la casona familiar del siglo XVIII en que está radicada Hifas da Terra (Bora, Pontevedra), les ha llevado a emprender su proyecto más reciente: un centro de interpretación, que incluirá senderos con paneles explicativos para que los hongos dejen de ser un secreto para los visitantes.

La empresa atesora una decena de premios. El último galardón, a la excelencia a la innovación para mujeres rurales, otorgado por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, lo recibieron hace unas semanas. "Nos hemos acostumbrado a los premios, hasta el punto de que si no los recibimos pensamos que algo estamos haciendo mal", concluye Catalina.