El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, propuso hoy un calendario con un plazo de un año para que palestinos e israelíes lleguen a un acuerdo de paz definitivo, y que incluye reanudar las negociaciones en un mes y conceder el estatuto de observador en la ONU a Palestina.

"Hay que dejar de debatir hasta el infinito y comenzar la negociación según un calendario preciso: un mes para retoman las conversaciones, seis meses para ponerse de acuerdo sobre las fronteras y la seguridad y un año para alcanzar el acuerdo definitivo", dijo Sarkozy durante su intervención ante el pleno de la Asamblea General de la ONU.

Asimismo planteó que se considere "para Palestina un estatuto de observador en Naciones Unidas.... Sería un paso importante y saldríamos del inmovilismo del que se alimentan los extremistas".

Con esta propuesta Sarkozy intentó proporcionar una salida a la crisis que se ha planteado después de que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, anunciase que el viernes presentará formalmente su petición a la ONU para que Palestina sea reconocido como un estado de pleno derecho.

El presidente francés consideró que con su propuesta se daría "esperanza a los palestinos", al tiempo que pidió a sus autoridades que eviten realizar "acciones que sean incompatibles con la reanudación de las negociaciones".

Después de subrayar que ya se conocen todos los elementos que deben formar parte de una solución, Sarkozy subrayó que "la paz tienen que lograrla palestinos e israelíes. Nadie la puede imponer", al tiempo que aconsejó a las partes "no imponer precondiciones a las negociaciones porque esa puede ser la vía del fracaso. Las condiciones previas nos llevarán al fracaso".

Igualmente advirtió para que nadie "eche un pulso" al Consejo de Seguridad, en una referencia a que un eventual veto a la petición palestina tal como ya ha anunciado Washington que hará si llega a plantearse, ya que podría llevar a nuevos escenarios de violencia en la región.

Sarkozy, en un discurso que dedicó íntegramente a la situación entre israelíes y palestinos así como a la llamada "Primavera árabe", señaló que "la llamada de justicia del mundo árabe ha conmocionado al mundo".

También consideró que para lograr la paz en Oriente Medio ya "no se puede esperar más. Los métodos (utilizados) hasta ahora han fallado", además recordó que "han pasado sesenta años sin lograr ni un centímetro de avances (en las negociaciones entre palestinos e israelíes) y eso debería de sugerir que hace falta cambiar el método".

El presidente de Francia subrayó que el éxito del proceso de paz "no se puede concebir" sin la presencia de Europa, así como "con la plena participación del Consejo de Seguridad y de los países árabes que ya han elegido la vía de la paz".