Sarkozy: "Francia no tiene un doble discurso con ETA"

Lleno absoluto. Diputados y senadores abarrotaron ayer el hemiciclo del Congreso de los Diputados para escuchar la intervención del presidente francés, que culminó su visita oficial a España. Nicolas Sarkozy consumió más de la mitad de su discurso en mostrar el compromiso de colaboración con España en materia antiterrorista. Lo selló asegurando que Francia luchará contra ETA “hasta acabar con el último terrorista”.

Sarkozy ha reiterado el ofrecimiento de su país para ayudar a acabar con ETA en una sesión solemne ante diputados y senadores en el marco de su visita de Estado a España (ver fotogalería), que hoy concluirá con la cumbre hispano-francesa.

A Sarkozy no le hizo falta mirar el discurso que previamente se había preparado y que le pudo haber servido a modo de chuleta. Tras un guiño al rey Juan Carlos por su papel “decisivo” el 23-F, “cuando todo podía haber basculado”, entró de lleno en materia, recordando que la democracia española aún tiene un enemigo: ETA. Y que, en el campo de la lucha antiterrorista, su país “no tiene un doble discurso”, sino que “siempre” colaborará con España.

El presidente galo alabó la unidad de PP y PSOE en la lucha contra ETA, a la que recordó que, en democracia, “la batalla de las ideas se libra en las urnas”. No faltaron alusiones a las víctimas del terrorismo.

El segundo tema dominante fue la necesidad de que España ocupe “el lugar que le corresponde” en las cumbres del G-20. Al igual que mantuvo en su discurso de la cena de gala que le ofrecieron los reyes, consideró un “deber” la presencia de España en estas citas internacionales. ¿Por qué? Porque es “una de las 20 economías más importantes del planeta”, y porque es “moderna, inventiva y valiente”. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, presente en el hemiciclo, también tendrá garantizado el “total” apoyo de Francia durante la presidencia española de la Unión Europea (UE). Para esta etapa, Sarkozy animó al líder del Ejecutivo a impulsar, entre otros aspectos, la defensa del medio ambiente.

En su discurso no faltó la autocrítica, recordando que “nuestros dos grandes pueblos no siempre han mantenido una relación serena”. Además de remontarse a la Guerra de la Independencia, recordó el enfrentamiento entre pescadores y agricultores galos y españoles tras el ingreso en la UE. Antes de concluir, alabó los triunfos de los jóvenes deportistas españoles. “Tengo un poco de envidia”, reconoció.

El presidente del Congreso, José Bono, precedió las palabras de Sarkozy elogiando al francés –“no deja indiferente a nadie”–, y la “pacífica y sana laicidad” francesa. Tras señalar que ambos países ya no tienen “cuentas pendientes”, se centró en la colaboración antiterrorista: “Hoy los asesinos temen por igual a los gendarmes franceses que a la Guardia Civil y la Policía españolas”.

El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, ha asegurado hoy en el Congreso de los Diputados que la democracia no puede "transigir" con los terroristas porque los asesinos "no ven la mano tendida, sino la debilidad.