El presidente francés, Nicolas Sarkozy, dijo el miércoles que Francia va a volver al mando militar integrado de la OTAN más de 40 años después de que su predecesor, Charles de Gaulle, lo abandonara.

De Gaulle dejó la estructura de mando, que es la responsable de la planificación estratégica, en medio de un enfrentamiento sobre la influencia de Estados Unidos en Europa, pero Sarkozy declaró en una conferencia de defensa que Francia necesita regresar al corazón de Europa para que se escuche su voz.

"Ha llegado el momento de poner fin a esta situación. Es por el interés de Francia y por el interés de Europa", señaló. "Tenemos que dejar de engañarnos con que al esconder la cabeza como una avestruz seamos capaces de proteger algo".

Francia es el cuarto mayor contribuyente de tropas a la Alianza Atlántica, y las autoridades han dicho que su exilio autoimpuesto del mando integrado estaba entorpeciendo su capacidad de influir en la toma de decisiones del grupo de 26 países.

El anuncio del miércoles supondrá pocas diferencias en la práctica en misiones como la de Afganistán, donde Francia tiene 2.800 soldados, pero es simbólicamente significativa y unirá firmemente las ambiciones europeas en defensa a la OTAN.

Los sondeos muestran que una mayoría de los votantes apoyan esta decisión, pero muchos de los enemigos políticos de Sarkozy la han criticado, diciendo que limitará la libertad de Francia en la escena internacional.

Muchos influyentes conservadores también se han distanciado de cualquier acercamiento al corazón de la Alianza, al considerarlo una traición de la visión de De Gaulle de una Francia independiente.

Francia fue miembro fundador de la OTAN, pero De Gaulle argumentó que no querían verse arrastrados a una guerra que no les interesara, por lo que abandonó la estructura militar en 1966. Esta decisión, en plena Guerra Fría, fue la culminación de años de rivalidad francoamericana por el control de la Alianza y de las armas nucleares.

INDEPENDENCIA NUCLEAR

Sarkozy agregó sin embargo que mantendrán la independencia de su arsenal nuclear y varios responsables indicaron que no tienen previsto entrar en el comité de planificación nuclear.

La capacidad nuclear francesa, con tecnología propia, tiene el apoyo de todo el ámbito político. La otra potencia nuclear europea, Reino Unido, la adquirió de Estados Unidos.

"Mantendremos nuestra disuasión nuclear independiente", afirmó. "Podemos tener un debate sobre los elementos disuasivos, deberíamos tener un debate sobre desarme, pero no compartiremos la toma de decisiones sobre nuestra fuerza nuclear".

Aunque Sarkozy podría autorizar el regreso al mando militar sin consultar a la Asamblea Nacional, ha convocado una moción de confianza para la próxima semana para dar más legitimidad a la decisión, que se espera gane con facilidad.

El presidente francés, que en abril acoge una cumbre con motivo del 60 aniversario de la Alianza, condicionó el regreso a un mayor papel para Europa en la organización. El miércoles afirmó que esa demanda se ha cumplido.