El presidente del Gobierno foral, Miguel Sanz, ha destacado que tras la ruptura de UPN-PP y la formación del PP en Navarra, su partido ha pasado políticamente a ocupar "un espacio muchísimo más centrado, puesto que ha aparecido un partido por la derecha".

En una entrevista con Efe, Sanz ha analizado el año que está a punto de finalizar y que, a su juicio, ha estado caracterizado por la crisis económica y "abre las puertas a otro año más complicado todavía".

La ruptura del pacto con el PP desde el punto de vista personal le ha supuesto "decepciones importantes en relación con algunos comportamientos, actitudes o decisiones", pero pese a ello ha dicho: "En lo que a mí respecta lo tengo superado".

De Mariano Rajoy ha afirmado no obstante que se sigue considerando "amigo personal". "De momento tenemos un distanciamiento, pero estoy convencido de que nuestra amistad perdura", ha dicho.

En cualquier caso, el presidente navarro ha abogado por "mirar hacia adelante" y destacar "todas las consecuencias positivas" que se han derivado para su partido, "y la primera -ha dicho- es que UPN ocupa políticamente un espacio muchísimo más centrado puesto que ha aparecido un partido por la derecha".

"Las personas que conforman el PP navarro son las personas más representativas del pensamiento más de derechas que anidaban entonces en UPN", ha subrayado.

Se ha mostrado también convencido de que, en cuanto a votos, el centro derecha "puede sumar más por separado que juntos" y ha considerado además que esta nueva situación a UPN le da "mucha más flexibilidad y más margen de maniobra para poder pactar con el Partido Socialista".

Entre otras cosas, ha explicado, "porque es muy difícil sostener un pacto de colaboración con el Partido Socialista" cuando se está representando a unas siglas que "a nivel nacional están en permanente confrontación y además sin voluntad de colaborar en los grandes asuntos de Estado", como los Presupuestos Generales.

Respecto a la violencia, Sanz ha lamentado que los terroristas "no son capaces de entender que con las pistolas y las bombas no se consigue nada. Y además son perseverantes en su empeño criminal, sabiendo como saben que no tienen otro fin que el de acabar en la cárcel, como de hecho está ocurriendo en los últimos tiempos".

Dejando claro que ETA es la única responsable del mantenimiento de la violencia, el presidente navarro se ha lamentado también de los fallos cometidos "desde este lado de la democracia" pensando que "se podía negociar con los terroristas", cuando la evidencia "debe llevar a la conclusión de que con los terroristas no se puede negociar nada".