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Ronnie Biggs cumple 80 años como hombre libre pero muy enfermo en un hospital

EFE

Un día después de que se oficializara su excarcelación, Ronnie Biggs, conocido como el "ladrón del siglo" por el asalto al tren de Glasgow (Escocia) en 1963, cumplie hoy 80 años como un hombre libre, pero muy enfermo e ingresado en un hospital.

Biggs se encuentra en el Hospital Universitario de Norfolk y Norwich (este de Inglaterra), adonde fue trasladado el pasado 28 de julio desde su celda en la prisión de Norwich aquejado de una neumonía severa.

No se espera que el ex recluso celebre su cumpleaños, que coincide con el 46 aniversario del atraco, pues se encuentra "extremadamente débil", según su familia.

El Ministerio de Justicia confirmó este viernes que los funcionarios de prisiones que custodiaban al "ladrón del siglo" se retiraron del centro médico, y que se entregó a Biggs la documentación que contiene las condiciones de su libertad.

No obstante, el conocido delincuente continuará en el hospital, ya que requiere asistencia de los cirujanos, toda vez que los médicos evalúan si podrá dejar próximamente el ambulatorio para trasladarse a una residencia de ancianos.

Su hijo, Michael Biggs, cuya madre es la brasileña Raimunda Rothen, se mostró este viernes exultante por la excarcelación, una noticia que tiene a su familia "loca de contenta".

Sin embargo, el nieto del conductor de tren que resultó herido en la cabeza durante el asalto de 1963 declaró al "Daily Telegraph" que Biggs se debería "pudrir en la cárcel".

"Ojalá Ronnie Biggs estuviera muerto. Deberían haber dejado que se pudriera en la cárcel. Biggs es un hombre terrible y debería haber cumplido sus últimos día en prisión", dijo Stephen Mills, de 46 años, cuyo abuelo, Jack Mills, fue golpeado con una barra de hierro durante el robo y nunca volvió a trabajar.

El pasado 1 de julio, el ministro británico de Justicia, Jack Straw, había denegado la libertad al antiguo atracador porque "no se arrepiente de su delito", pero cambió de parecer este jueves por "motivos médicos".

El preso, que venía solicitando su libertad en los últimos años, casi no puede caminar ni hablar y recibe alimentación por un tubo.

Además, Biggs ha sufrido varios ataques cardíacos, apoplejías y crisis epilépticas desde mayo de 2001, cuando decidió entregarse voluntariamente a la Justicia británica, tras huir en 1965 a Brasil.

El preso se hizo famoso por el denominado "robo del siglo", en el que él y catorce cómplices sustrajeron el 8 agosto de 1963 unas 2,6 millones de libras (4,2 millones de dólares) del tren de Glasgow, la mayor suma robada hasta entonces en un único asalto.

Tras cumplir sólo quince meses de los treinta años de cárcel de su condena, Biggs se fugó de la prisión de Wandsworth (suroeste de Londres) y terminó en Brasil después de pasar por varios países.

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