El Rey pasará la noche en Kuwait de regreso de su visita a Afganistán

El Rey de España se ha reunido esta tarde en Kuwait, donde pasará la noche, con el emir jeque Sabah al Ahmad al Sabah, nada más llegar a esta ciudad procedente de Herat, en el oeste de Afganistán, donde visitó a los casi 500 militares españoles destacados allí.

Don Juan Carlos se ha entrevistado con el mandatario kuwaití acompañado por el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, y el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), Félix Sanz, que también estuvieron con él en Herat.

Aunque el encuentro ha sido breve, las autoridades anfitrionas han dado una gran importancia a la presencia del Monarca español, como lo demuestra el que el emir haya estado acompañado del príncipe heredero y de los ministros de Finanzas, Exteriores, Defensa e Información, entre otros.

La estancia de Don Juan Carlos en el emirato durará apenas unas horas, puesto que mañana mismo regresará a Madrid, adonde tiene previsto llegar poco después del mediodía.

Aunque no ha transcendido nada de este encuentro bilateral, que ha tenido lugar en el palacio presidencial Dar Salva, Don Juan Carlos habrá hablado de su experiencia de esta mañana en Afganistán, uno de los países más pobres del mundo, donde la inestabilidad salpica a toda la zona, cuestión que también interesa en gran manera a Kuwait, que además mantiene unas excelentes relaciones con España.

Ayer domingo, de camino a Afganistán, el avión de la Fuerza Aérea española en el que el Rey viajó desde Madrid se quedó en Kuwait porque el acceso a la base de Herat es más seguro en un avión Hércules, como el que utilizan las tropas españolas en el país asiático para sus desplazamientos.

La sorpresa de los militares de España, Italia, Eslovenia, Bulgaria y Albania esta mañana ha sido enorme cuando han sabido que llegaba Juan Carlos I a la base de Herat.

El Rey ha estado cinco horas con estos hombres y mujeres, una muestra de los cerca de 3.000 militares que tiene España en misiones de paz en Bosnia, Kosovo, Afganistán y el Líbano, y ha podido comprobar de cerca cómo es la vida en estos destinos, en los que suelen estar alrededor de cuatro meses.

En esas horas, Don Juan Carlos ha podido conocer su trabajo para pacificar la zona y para entrenar al Ejército afgano y ha podido ver la ayuda que prestan a la población no sólo en el hospital español que hay en la base de Herat, sino también en colegios y zonas deportivas cercanos, de cuya reconstrucción y mantenimiento se encargan.

En Herat están destacados unos 500 de los 690 militares españoles pertenecientes a la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF) que lleva a cabo una misión de paz en ese país bajo mando de OTAN y mandato de la ONU.

El objetivo del Rey con este viaje era mostrarles el apoyo de la Corona y el suyo propio como Jefe de las Fuerzas Armadas en un día tan especial como es el último del año.

Por eso, el Monarca les ha trasmitido su más caluroso afecto en su nombre y el de la Familia Real y ha deseado a todos los militares españoles que están en el exterior un feliz 2008 en el que puedan completar su misión "con éxito y regresar a España con la satisfacción del deber cumplido".

Ya en el discurso que pronunció el pasado 24 de diciembre Juan Carlos I se refirió a esos hombres y mujeres que engrandecen a España con su labor, mencionando expresamente a aquellos que fallecieron por ese motivo.

Afganistán fue el lugar donde el pasado 24 de septiembre murieron los dos últimos militares españoles que han perdido la vida en misiones de paz en el exterior, y hasta esas tierras ha viajado el Monarca el 31 de diciembre de 2007.