El rey recibirá este jueves en el Palacio de la Zarzuela a la Fundación de Víctimas del Terrorismo, cuatro días después de la manifestación convocada en Madrid por la Asociación de Víctimas del Terrorismo para protestar por la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre la doctrina Parot.

La reunión, no prevista inicialmente en la agenda de la Familia Real para esta semana, se celebrará a mediodía, con representantes de la fundación, encabezada por su presidenta, Mari Mar Blanco, y sus dos vicepresidentes, Ángeles Pedraza y Tomás Caballero, después de las críticas de varias víctimas de ETA por la 'instrumentalización' que hizo el PP de la manifestación de las víctimas del terrorismo.

Consuelo Ordóñez, hermana del concejal del PP Gregorio Ordóñez asesinado por ETA en 1995 y presidenta de Covite, denunció el viernes la 'instrumentalización' que a su juicio el PP ha hecho de la concentración convocada por las víctimas del terrorismo tras la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) contraria a la doctrina Parot. Concretamente, ha dicho que 'es vergonzosa la instrumentalización que está haciendo el partido del Gobierno, el mismo por el que mi hermano murió, de la concentración del domingo'. 

Este sábado, miles de personas secundaron una convocatoria de las víctimas del terrorismo en Madrid para pedir justicia tras la sentencia del Tribunal de Estrasburgo. La protesta fue convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), presidida por Pedraza, y también acudió Mari Mar Blanco.

En la concentración hubo críticas a los políticos porque las víctimas consideran que pudieron hacer 'algo más' para evitar la sentencia contraria a la 'doctrina Parot'. Los reproches se dirigieron también a los representantes del PP presentes en la protesta, como sus tres vicesecretarios generales (Esteban González Pons, Carlos Floriano y Javier Arenas) o la delegación del PP vasco.

Desde el anuncio de la decisión de Estrasburgo de derogar la doctrina Parot, el Partido Popular emprendió una frenética carrera por congraciarse con las víctimas en un intento por aplacar el descontento de parte de sus votantes con la decisión del Gobierno de acatar la sentencia dictada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. A efectos prácticos, la decisión del TEDH supondrá la liberación de decenas de presos de ETA y algunos condenados por delitos comunes, que en la mayor parte de los casos estarían en libertad de no haberse instaurado la polémica doctrina.

Tras la sentencia del TEDH, Mari Mar Blanco y Pedraza ya se reunieron con los ministros de Interior y Justicia, Alberto Fernández Díaz y Alberto Ruiz Gallardón, y también lo hicieron con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Palacio de la Moncloa.