El príncipe Enrique de Inglaterra espera que su abuela, la reina Isabel II, se sienta orgullosa de él tras su gira por el Caribe y Brasil con motivo del Jubileo de Diamantes de la soberana, informa hoy la cadena británica BBC.

Tras recorrer Belice, Jamaica, las islas Bahamas y Brasil, el príncipe Enrique calificó su viaje de "emocionante" y aseguró que, antes de partir, tuvo una conversación con la Reina en la que ésta le animó a pasarlo bien.

"Me dijo: 'Disfrútalo, espero que me hagas sentir orgullosa'. Fue una charla típica de abuela a nieto", comentó el príncipe a la BBC desde Brasil, donde se encuentra hoy en visita privada después de cerrar ayer su gira oficial.

El príncipe, que confesó sentirse "exhausto", agradeció la "calidez" de las bienvenidas que ha recibido en cada una de las etapas del viaje, el primero oficial que realiza en solitario en representación de Isabel II, de 85 años y que lleva 60 años en el trono británico.

"Personalmente no tenía ni idea de cuánta influencia tiene la Reina en todos estos países. Para mí ha sido una lección de humildad y, de hecho, me sigue sorprendiendo a veces la forma en que celebran su 60 aniversario", afirmó el príncipe, de 27 años y tercero en la línea de sucesión.

Tras seis días en los que, entre otros actos, corrió junto al atleta jamaicano Usain Bolt, bailó en Belice y jugó al polo en Brasil, el príncipe Enrique expresó su satisfacción por haberse involucrado de "forma activa" en las celebraciones del Jubileo y no limitarse solo a figurar en los actos.

"Nunca me he tomado muy en serio a mí mismo y espero que en casa todo el mundo lo vea así, me lo he pasado genial", subrayó el hijo menor del príncipe Carlos y la fallecida Diana de Gales.

Después de visitar las ex colonias británicas, miembros de la Commonwealth, Enrique llegó el viernes a Brasil, donde visitó favelas y conoció la labor de distintas organizaciones benéficas.

"Lo más importante en mi vida son los niños. No se si es algo que heredé de mi madre o de mi padre, pero siento que tengo un enorme niño dentro de mí, y conecto y conectaré siempre con los niños", aseguró.

En Brasil, anunció su deseo de extender a otros países el trabajo de su ONG Sentebale, que ayuda a niños huérfanos con sida en el país africano de Lesoto.

"No es sólo Lesoto. Creo que hay niños desfavorecidos alrededor del mundo que no tienen esperanza y necesitan ayuda, incluso en el Reino Unido y Brasil. Entiendo que soy un privilegiado por estar en la posición en la que estoy", afirmó.