Piratas somalíes exigen que España libere a sus dos compañeros

Los piratas somalíes que retienen al atunero español "Alakrana" no negociarán su liberación a menos que sean liberados sus dos compañeros, que declaran hoy ante la Justicia española acusados de secuestro, informó un miembro de la banda el martes.

Los dos hombres, a los que el martes iba a tomar declaración el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, fueron detenidos por la Armada española en el océano Índico poco después de que el Alakrana fuera capturado con sus 36 tripulantes el 2 de octubre.

Garzón estimó en el auto en el que ordenó su traslado urgente a España que los dos piratas, identificados como Abdu Willy y Raagegeesey, podrían haber cometido delitos de detención ilegal, robo con violencia y uso de armas.

Las patrullas de la operación Atalanta de la Unión Europea no ha logrado detener los secuestros de las bandas de piratas somalíes fuertemente armados en las rutas marítimas que unen Europa y Asia.

"Hemos decidido que no deberíamos negociar sobre la liberación de la tripulación y la embarcación a menos que nuestros dos camaradas sean liberados y devueltos con seguridad a Haradheere", dijo Hasan Abdulkadir, uno de los piratas que retienen al Alakrana, a Reuters por teléfono.

Haradheere es un bastión pirata al norte de la capital somalí, Mogadiscio.

Abdulkadir, que dijo ser un familiar de uno de los dos trasladados a Madrid, dijo que los tripulantes del Alakrana, procedentes de España, Indonesia, islas Seychelles, Madagascar y Senegal, estaban bien.

El Gobierno español ha pedido ayuda al hostigado Gobierno de Somalia para liberar al pesquero vasco.

En mayo, la Audiencia Nacional intentó traer a España a un grupo de supuestos piratas somalíes, pero finalmente los entregó a Kenia.

Muchos piratas han eludido su procesamiento por las dudas sobre la jurisdicción donde son capturados o porque los gobiernos occidentales temen que intenten pedir asilo si son llevados a sus países para juzgarlos.

El año pasado, los miembros de la tripulación de otro barco español, el Playa de Bakio, fueron puestos en libertad en la zona después de que, según un responsable somalí, se pagaran 1,2 millones de dólares de rescate.