El partido de Berlusconi apoya la división de Telecom Italia

El principal partido italiano apoyó la separación de la red de telefonía fija de Telecom Italia por 14.900 millones de dólares (unos 11.600 millones de euros), pero su consejero delegado, Franco Bernabe, rechazó la propuesta calificándola de "ilegítima".

El responsable económico de Forza Italia, Pierluigi Borghini, explicó en una conferencia el jueves que el partido apoya la creación de una compañía que englobe al encargado de la financiación de infraestructura, F12, el holding italiano, Cassa Depositi e Prestiti, y un gran número de empresas extranjeras.

Aún así, el subsecretario de Industria, Paolo Romani, ministro de telecomunicaciones de Forza Italia, dijo que la propuesta del partido del primer ministro Silvio Berlusconi era prematura y que no podía hacerse sin la participación de Telecom Italia.

No rechazó la posibilidad de que se haga en un futuro.

Mientras, Borghini dijo que la compra por parte de la nueva compañía implicaría un aumento de capital de 10.000 millones de euros.

Citó a compañías como Siemens-Nokia, Ericsson, Alcatel-Lucent y ZTE Corp, que habrían confirmado la aportación de 1.000 millones de euros cada una para equipar a la red, pero un portavoz de Nokia-Siemens denegó haber expresado su interés.

El portavoz de Ericsson, Frederik Hallstan, dijo: "Es un rumor y no hemos oído nada al respecto".

Borghini citó a Alcatel en su discurso en la conferencia, pero no incluyó a la empresa en el comunicado entregado a la prensa.

Forza Italia estima que el coste de una medida semejante alcanzaría los 11.500 millones de euros. La propuesta sitúa a Telecom Italia como máxima propietaria y a los nuevos inversores como propietarios del 40 por ciento.

Bernabe, que repetidas veces ha dicho que no tiene planes de dividir sus redes, explicó que la creación de una empresa de banda ancha era problema del estado, no de Telecom.

"Cualquier tipo de intervención "dirigista" típico de regímenes que afortunadamente han desaparecido, sería ilegítima e inapropiada porque dañaría los derechos de la empresa privada", afirmó.

El director del comité de telecomunicaciones parlamentario dijo en enero que el Gobierno buscaba la separación de la red de línea fija para centrarse en inversiones en banda ancha. El plan de la compañía telefónica para abrir el mercado a los competidores fue aprobado por el regulador de telecomunicaciones en diciembre.

El Banco de Inversiones Europeas dijo que había dado su aprobación a financiar con 600 millones de euros a lo largo de ocho años a Telecom Italia para invertir en su banda ancha y en redes de Internet.