Los padres de Marta pierden la esperanza

"Hemos perdido la esperanza de que alguien dijera algo sobre el paradero del cuerpo de Marta". No es el tono habitual del incansable Antonio del Castillo, padre de la joven sevillana de 17 años asesinada en enero de 2009 y cuyo cuerpo aún no ha aparecido. Pero ni él ni la madre de la chica, Eva Casanueva, podían ocultar ayer su decepción.

"De aquí no sale nada nuevo ya", dijo Del Castillo. Acababa de terminar la tercera sesión del juicio contra El Cuco, de 17 años, para el que el fiscal pide seis años de internamiento y tres de libertad vigilada por la violación y asesinato de Marta. Ayer le tocó declarar a la joven de 16 años que convivía con Miguel Carcaño, principal sospechoso del crimen, cuando este tuvo lugar.

Tras haber dado varias versiones contradictorias durante estos dos años algunas en entrevistas televisadas en programas estelares, ayer no aportó nada nuevo ante el juez. Sólo señaló que Carcaño salió de madrugada la noche del crimen por la ventana del dormitorio que ambos compartían.

Fuentes de la fiscalía señalaron que esta afirmación fortalece la tesis acusatoria, según la cual los cuatro principales implicados se encontraron a la 1.30 horas en el piso de León XIII, donde se cometió el crimen, para deshacerse del cuerpo. El resto de testigos de ayer, muy secundarios, no aportó información sobre el papel de El Cuco, según fuentes de la fiscalía.

A la escasez de revelaciones de ayer se suma la de las dos sesiones previas, en las cuales El Cuco se desdijo de su confesión inicial y se declaró inocente, mientras que Carcaño y el resto de imputados clave en el proceso contra los adultos que en este son testigos no declararon.

Los padres también testificaron ayer. La fiscalía pretendía demostrar con su declaración el tercer delito imputado a El Cuco: el de atentado contra la integridad moral de la familia. Para ello, Antonio y Eva narraron al juez su tormento ante los cambios de declaración de El Cuco, que forzaron vaivenes en la investigación. La fiscalía aportó también una pericia de dos médicos forenses acreditando el daño psicológico causado a ambos.

Fue un testimonio "desgarrador", según los presentes en la sala. Sobre la relación de Marta con el menor ahora juzgado, Eva Casanueva dijo: "Ella siempre protegía a sus amigos. A El Cuco sobre todo, porque lo veía más pequeño y lo trataba como a un niño, con especial ternura".

Por otra parte, el presidente de la Audiencia de Sevilla, Damián Álvarez, solicitó ayer a la policía una especial protección para los abogados que asisten al juicio, después de que el miércoles uno de ellos sufriera una agresión a la salida de los juzgados.