La Misión de Observadores de la Unión Europea (EUMM) en Georgia comenzó hoy oficialmente sus labores de seguridad en la franja que separa el territorio administrado por Georgia de las regiones separatistas de Abjasia y Osetia del Sur.

En la ciudad de Bazaleti, a unos 40 kilómetros de la capital, Tiflis, los observadores comenzaron a patrullar la zona a las 09.00 hora local (05.00 GMT).

Tanto Bazaleti como las ciudades de Gori, Poti y Zugdidi acogen los centros regionales de la misión de observadores, cuyo cuartel general se encuentra en la capital georgiana.

El jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Javier Solana, llegó la víspera a Tiflis para dar comienzo a las labores de los observadores civiles europeos en la franja de seguridad.

En la capital, Solana asistió a la apertura del centro de la EUMM y visitó también la ciudad de Gori, que se encuentra a unos veinte de kilómetros de la región separatista de Osetia del Sur.

Asimismo, se reunió con el presidente de Georgia, Mijaíl Saakashvili, a quien aseguró que los Veintisiete defienden la integridad territorial del país caucásico en el marco de las fronteras reconocidas internacionalmente.

La EUMM en Georgia estará integrada por más de 300 personas, entre observadores, personal administrativo y logístico, de 22 países miembros.

Según el acuerdo suscrito entre Rusia y la UE, los observadores europeos debían asumir el 1 de octubre las funciones de seguridad en la franja que separa el territorio administrado por Tiflis de las regiones separatistas de Abjasia y Osetia del Sur.

Mientras, las tropas rusas dispondrán de diez días para abandonar la zona, donde los rusos han llegado a contar con 25 puestos de control militar.

Los observadores serán desplegados en la capital, Tiflis; el distrito de Gori, cerca de Osetia; Zugdidi, limítrofe con Abjasia; y en el estratégico puerto de Poti (mar Negro).