El grupo BFA-Bankia obtuvo en el primer semestre del año un beneficio atribuido de 358 millones, que en términos netos asciende a 428 millones de euros, tras destinar las plusvalías extraordinarias a provisiones.

Según la información remitida hoy a la CNMV, los resultados están en línea con su previsión de ganar 800 millones en todo 2013 y no incluyen los 1.795 millones fruto de la conversión de preferentes y deuda subordinada, aunque sí 284 millones generados en el segundo trimestre en plusvalías y destinadas a saneamientos no recurrentes.

En esa partida se cuentan los 167 millones extraordinarios que el grupo se embolsó al vender su participación del 12% en IAG, fruto de la fusión de Iberia y British Airways.

En cuanto a los resultados de la filial cotizada, Bankia logró hasta junio un beneficio neto de 192 millones, que se elevan a 200 en el atribuido, pese a verse afectados por los 142 millones en intereses pagados por el préstamo que le concedió su matriz.

El grupo nacionalizado, que recibió ayudas públicas por un importe superior a 22.000 millones, volvió a beneficios en el primer trimestre del año y destaca que ha dotado ya 525 millones para hacer frente a parte de las reclamaciones por preferentes y subordinadas del proceso de arbitraje.

Pero como dispone de otros 1.270 millones por el mero canje con descuento de los 'híbridos' —preferentes y subordinadas— insiste en que tiene 'recursos suficientes' para asumir el coste adicional que puedan tener los arbitrajes sin necesitar más ayudas.

Además, el banco que preside José Ignacio Goirigolzarri incide en su capacidad para generar capital por sí mismo mediante la retención de beneficios y la reducción de activos de riesgo, lo que le ha llevado a sumar 754 millones en el primer semestre para acabar con una ratio de capital principal del 10,32%.

Respecto a las cuentas de Bankia, que son donde realmente se ve la evolución del negocio, el margen de intereses acumulado en el primer semestre del año contando el impacto del coste financiero del préstamo de la matriz alcanzó los 1.092 millones, un 35,9% menos que en el mismo periodo.

Aún así, como esa cifra se divide entre 512 millones del primer trimestre y 580 millones del segundo, la entidad asegura que se ha iniciado un 'cambio de tendencia' a pesar del momento económico.

El margen bruto, que aglutina todos los ingresos, alcanzó en el primer semestre los 1.773 millones, un 23,9% menos, pero el grupo señala que se mantienen 'estables' a pesar del cierre de oficinas, 666 en lo que va de año dentro del objetivo de clausurar 1.143 antes de abril de 2014.

Por su parte los gastos de administración se redujeron un 15,1% respecto a la primera mitad de 2012, hasta 888 millones, igualmente con una evolución mejor en el segundo trimestre frente al primero.

Todo ello permitió a Bankia un resultado antes de provisiones de 791 millones, un 31,2% menos que el primer semestre de 2012.

La entidad recuerda su esfuerzo para conceder más crédito, aunque en el conjunto de los seis primeros meses se redujo un 3% en el caso de familias y empresas, mientras que los depósitos -incluyendo financiación con cámaras- crecen un 3,6 %, hasta 114.873 millones.

A pesar de que por segundo trimestre consecutivo Bankia redujo el saldo de morosos y acumula en la primera mitad de año una reducción de 514 millones, el descenso más acusado del crédito hace que la morosidad suba al 13,36 %, mientras la cobertura mejora al 63,04 %.

A junio de 2013, Bankia tiene unas coberturas del 24,4% en los créditos refinanciados, una cartera de 22.113 millones, de los que un 44,2 % ya están clasificados como morosos, pero un 39,5 % aún figuran como normales o al corriente de pago.