El español Albert Montañés dijo hoy adiós al torneo de Indian Wells, primer Masters 1000 de la temporada, con una derrota por 7-6 (7) y 6-2 ante el croata Ivo Karlovic, y dijo a Efe que la clave del duelo residió en el primer set.

"Sí, el primer set ha sido la clave", admitió el barcelonés, que cayó en octavos de final. "Sabía que sería complicado, que sería un partido sin ritmo. Él saca muy bien y es muy difícil restar, pero tenía opciones y comencé el primer juego con dos bolas de rotura, pero me adivinó un 'passing' y lo ganó", añadió el tenista.

La primera manga resultó de lo más igualada y se decidió en un disputado desempate".

"Cada uno hemos seguido con su saque, tranquilos, y la pena ha sido el 'tie-break'. Se me ha escapado por un par de fallos en mi saque. Él no se cansar de conseguir saques directos y así gana juegos muy fácil", dijo Montañés sobre su rival, que consiguió 16 saques directos".

El tenista, de 30 años, confirmó que las molestias que sintió el el muslo con 3-2 en el primer set le lastraron a lo largo del duelo, pero agregó que eso no es excusa para explicar el resultado.

"Me costaba agacharme y me pegaba el tirón atrás, más de revés que de derecho, pero no quiero poner excusas; el partido es el que era y aunque hubiera tenido bien la pierna es probable que hubiera perdido. Puede ser. Pero si no hubiera podido seguir, me hubiera retirado", manifestó a Efe.

Montañés se despide del campeonato "cabreado" y "decepcionado" por la inmediatez de la derrota, pero con la cabeza ya en el torneo de Miami dentro de una semana.

"Tenía una buena ronda para pasar pero no me gustaba nada el rival. No se puede jugar al tenis (con él), todo el rato a raquetazos. Pero esos puntos también valen. Seguramente mañana estaré más contento y tranquilo", declaró el de Sant Carles de la Rápita.

Por último afirmó que su objetivo para esta temporada es "ser regular, estar entre los 30 primeros del ránking, estar bien física y anímicamente, y, sobre todo, disfrutar en la pista".