Este artículo se publicó hace 14 años.
Mas se modera para lanzar su precampaña
Exhibición de fuerza de CiU en la proclamación oficial de su candidato
Las 4.000 personas que abarrotaron el recinto barcelonés donde Artur Mas fue proclamado oficialmente candidato a la Generalitat fueron testigos de que CiU ha aprendido la dura elección de las últimas elecciones: se acabó el cuerpo a cuerpo y el fustigar a los adversarios.
Mas se dirigió a un público entregado con un discurso en positivo, en que ensalzó la "ilusión" con que la federación que preside ha subsistido los casi siete años que lleva instalado en la oposición y pidió un "cambio" evitando acribillar al tripartito o al resto de formaciones. Para recalcar esta moderación, Mas sacó a relucir su primera zanahoria electoral y habló ya en clave de president: "Mi compromiso es que el próximo Govern tendrá la mejor gente de este país, si son de CiU, mejor, pero si en otro lugar hay alguien más preparado, lo iré a buscar".
«Si en otro partido hay gente más preparada, la iré a buscar», anunció
A lo largo de su intervención, el ya candidato evitó hacer del debate identitario la base de sus compromisos y se centró en la gestión de la crisis y la creación de empleo. "Sobre un país empobrecido no podremos hacer ningún debate trascendente", declaró.
Soberanismo dosificadoAsimismo, Mas mantuvo una calculada ambigüedad a la hora de fijar su postura en lo referente al encaje de Catalunya en el Estado y se cuidó mucho de dar alas al soberanismo. "Tenemos toda la profundidad del horizonte y toda la altura del cielo para hacer realidad nuestros sueños; no hemos de renunciar a hacer un país mejor y más libre", dijo.
Además, añadió que "Catalunya puede aceptar ser una nación dentro de un Estado, pero nunca aceptará ser una provincia dentro de un Estado". Mas se aseguró de recordar que hay "décadas" de tiempo para "situar el país en el mundo", explicitando que no comparte las prisas de ERC.
Mas alternó guiños a los empresarios con críticas a la administración
El líder de CiU empleó otra fórmula imprecisa para amagar con su reacción a una posible sentencia laminadora del Tribunal Constitucional (TC) respecto al Estatut: "No discutiremos la legitimidad del TC, pero primero acataremos la voz expresada en las urnas por el pueblo de Catalunya".
Mas exhibió su perfil más liberal exaltando el papel de los empresarios: "Catalunya no la ha hecho la administración, la ha hecho su gente". En este sentido, pidió que no crezca más el sector público y afirmó que le "subleva" que los emprendedores digan que les tratan mejor en otras comunidades.
Con todo, fue un arranque suave y sin polémicas que constata que CiU huirá, esta vez sí, de la confrontación.
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