El ministro de Industria, Comercio y Turismo de España, Miguel Sebastián, visitó hoy la ampliación del Canal de Panamá, que consideró como "la principal obra de ingeniería civil del mundo", y se declaró orgulloso de que en ella participen empresas españolas.

Sebastián afirmó que la apuesta inversora por Latinoamérica que han hecho las empresas españolas en las últimas décadas ha sido "un éxito" y que la ampliación del Canal de Panamá es muestra de ello.

"Ahora que la crisis internacional golpea a toda la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), a Europa y a América del Norte, América Latina es una de las regiones del mundo con más crecimiento, y se ha demostrado que ha sido un éxito de las empresas españolas" el haber invertido en Latinoamérica a tiempo, dijo Sebastián a Efe durante la visita a las obras.

El ministro español, que hoy concluye en Panamá una corta gira latinoamericana que le llevó también a Colombia, destacó que tras una primera oleada inversora en las áreas de comunicaciones, de los servicios financieros y la energía "las empresas españolas decían que se habían equivocado y que Latinoamérica iba a ser su ruina".

"Ahora estamos viendo una segunda oleada (inversora española), sobre todo en el área de las infraestructuras", agregó.

Dentro de la ampliación del Canal, la principal obra adjudicada, la construcción de un nuevo carril con esclusas más anchas, que permitirán el paso de barcos de hasta 250.000 toneladas de desplazamiento, frente a las 75.000 actuales, fue adjudicada a un consorcio encabezado por la empresa española Sacyr-Vallehermoso.

En los trabajos, valorados en 3.118 millones de dólares y que deben estar concluidos en 2014, Sacyr participa (48 por ciento) junto a la italiana Impregilo (48), la belga Jan de Nul (3) y la panameña Constructora Urbana (1 por ciento), explicó el jefe de obras para el Atlántico, Bernardo González.

Otro de los mayores contratos para la ampliación de la vía interoceánica, la excavación de un nuevo cauce que unirá las nuevas esclusas con el Canal, por 268 millones de dólares, está a cargo de un consorcio integrado por la española Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), la mexicana ICA y la costarricense Meco.

FCC, junto a la brasileña Odebrecht, se adjudicó también este mes por 1.446 millones de dólares la construcción de la primera línea de metro de la ciudad de Panamá.

Las obras del Canal son "un buen ejemplo" de la oleada de inversiones españolas en infraestructura, "porque es la principal obra de ingeniería civil del mundo", declaró en ministro Sebastián.

El presidente de Sacyr, Luis del Rivero, que personalmente explicó al ministro en qué consiste la ampliación del Canal, en declaraciones a Efe se mostró convencido de que terminarán los trabajos en el tiempo establecido en el contrato.

"Por supuesto, las acabaremos en tiempo, como hemos hecho siempre. Cuando ha habido que terminar cualquier cosa complicada, como pasar por debajo de la Sagrada Familia o la llegada a Barcelona (...), nosotros siempre hemos terminado antes del plazo", dijo Del Rivero refiriéndose a la construcción del tren de alta velocidad entre Madrid y Barcelona y las complicaciones que representó.

El presidente de Sacyr aseguró que cuentan con que van a entregar la obra antes del plazo, debido a los 215.000 dólares diarios de bonificación, con un máximo de 50 millones de dólares, que incluye el contrato y que supone "un aliciente más", afirmó.

Tras visitar el Canal, el ministro Sebastián mantuvo un almuerzo de trabajo con sus colegas panameños de Comercio e Industria, Roberto Henríquez, y de Obras Públicas, Federico Suárez, antes de ser recibido por el presidente Ricardo Martinelli.

El principal objetivo de la visita del ministro, que concluye hoy, es conocer de primera mano algunos de los principales proyectos de inversión de las empresas españolas y tratar con sus colegas panameños el modo de impulsar la cooperación ya existente.