La Fiscalía y el juzgado de lo penal que condenó a María Sevilla, la que fuera presidenta de la Asociación Infancia Libre, ha pedido el indulto parcial para que pueda salir de prisión.

Sevilla fue condenada a dos años y cuatro meses de cárcel y otros cuatro de inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad por la sustracción de menores, después de permanecer en paradero desconocido con su hijo durante más de un año, después de que un juzgado decretara en diciembre de 2017 el cambio de custodia hacia el padre del menor.

Los informes se oponen a retirarle la prohibición de cuatro años para ejercer la patria potestad al considerar que el interés superior del menor queda garantizado con las visitas de María Sevilla a su hijo en un Punto de Encuentro Familiar. Sin embargo, tanto el juez como el fiscal consideran que el interés superior del menor queda garantizado con las visitas de María Sevilla a su hijo en un Punto de Encuentro Familiar.

Según el escrito, al que ha tenido acceso Público, Sevilla habría "consignado la indemnización de 5.000 euros por daños morales a su exmarido a la que también fue condenada" y que con la rebaja de la condena hasta los dos años para que la presidenta de Infancia Libre pueda salir de prisión se conseguiría el objetivo de que "se produzca una adecuada reinserción social de la penada".

Además, prosigue la Fiscalía, Sevilla ha mostrado asumir sus responsabilidades "ingresando voluntariamente en centro de cumplimiento, encontrándose así a disposición judicial, y para no perjudicar las relaciones materno-filiales con su hija".

La Fiscalía aprecia un acatamiento de la legalidad conculcada y asunción de responsabilidades "que se evidencia al haber satisfecho las responsabilidades civiles fijadas en la sentencia e ingresado voluntariamente en centro de cumplimiento".

Desde el inicio Sevilla ha afirmado que el único motivo para desaparecer fue el de proteger a su hijo de malos tratos y de los supuestos abusos sexuales que el menor manifestó con cuatro años.