Este artículo se publicó hace 11 años.
El juez del caso Alvia asegura que permitir la circulación sin suficiente seguridad fue "decisivo"
El magistrado Aláez dicta un auto en el que cita a declarar como imputados a cinco responsables de la seguridad de circulación de Adif y llamará en la misma calidad a los tres últimos presidentes del ente público.
El magistrado Luis Aláez, que investiga el accidente de tren que el pasado 24 de julio provocó la muerte de 79 personas en el barrio compostelano de Angrois, ha llamado a declarar, en calidad de imputados, a cinco responsables del administrador de infraestructuras ferroviarias (Adif), pero asegura que la delegación de esta responsabilidad en ellos fue responsabilidad del Consejo de Administración de Adif, por lo que citará también a los tres últimos presidentes de estaentidad pública dependiente del Ministerio de fomento.
Según el auto dictado, facilitado por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), dos de los imputados están convocados para el 18 de septiembre y los tres restantes al día siguiente, cuando aún no hay fecha para la citación del actual presidente, Gonzalo Ferre; y Enrique Verdeguer y Antonio González Marín, sus antecesores
"Los citados presumiblemente no cumplieron estos deberes [controlar los riesgos de la circulación ferroviaria]", asegura el magistrado en el auto que ha emitido este martes (ver aquí en PDF), en el que les achaca depositar en el maquinista toda responsabilidad "conociendo las características de la vía a la altura de la curva de A Grandeira". "No podía pasarles desapercibido el peligro cierto de desatención" por parte del conductor, prosigue el auto.
Más allá del fallo humano A los responsables de seguridad "les era perfectamente conocible que la probabilidad de error humano era alta", dice el juezCasi dos meses después de la mayor tragedia ferroviaria en la historia de España, el juez Aláez quiere ir más allá del "fallo humano" del maquinista, Francisco José Garzón, haciendo responsable a los directivos de Adif, no sólo a los que ejercían un cargo cuando el Alvia Madrid-Ferrol descarriló, sino desde la apertura del tramo en el que sucedió, quienes según el magistrado fueron responables de autorizar la apertura del tramo sin garantizar las medidas de seguridad exigidas por el ordenamiento jurídico.
"Sorprende que el propio Adif señale [...] pilares básicos de la seguridad el conocimiento de la línea por parte del maquinista", aprecia el juez, quien continúa: "Al permitir circular con el sistema ASFA -en lugar del ERTMS, sistema más avanzado, completo y automático- [...] se deja exclusivamente en manos del maquinista la reducción de velocidad", cuando a los responsables de seguridad de circulación "les era perfectamente conocible que la probabilidad de error humano era alta".
Un conocimiento que, para el magistrado, también se extiende a "los órganos directivos y gestores", quienes "pudiendo remediarlo no han adoptado medidas para evitarlo [...] incumpliendo deberes de cuidado impuestos por la normativa", recode en su auto.
Por ello solicita igualmente a Adif, a través de su representación procesal, que facilite la identidad "de todas las personas que han sido presidentes y vocales" del Consejo de Administración desde que se abrió el tramo a la circulación hasta el día de hoy y también de los que han desempeñado en esta empresa pública los cargos de director de seguridad en la circulación, gerente del área de seguridad en la circulación noroeste y jefe de inspección de la gerencia de área de seguridad en la circulación noroeste, así como de los inspectores, todos ellos considerados "potenciales autores del sobredicho delito imprudente".
En todos los casos, desde el día de entrada en servicio del tramo de la línea ferroviaria en que se produjo el trágico siniestro hasta la fecha actual, "a fin de poderles tomar declaración en calidad de imputados".
Permitir la circulación, decisivo"Lo decisivo ha sido permitir la circulación de trenes por un tramo de línea carente de las medidas de seguridad", concluye Aláez, quien ve el momento en el que la línea entra en servicio como una "omisión" que puede "concretarse en un resultado lesivo". Una responsabilidad que, en última instancia,no recae sólo sobre los cinco imputados.
En un auto previo emitido por el juez, éste precisaba para argumentar la imputación de los responsables de Adif que las muertes y lesiones que causó el siniestro se encuentran "obviamente conectadas" con la conducción inadecuada por exceso de velocidad del maquinista, Francisco José Garzón Amo, pero precisaba que el gestor ferroviario incurrió en una "imprudencia punible" al descuidar la señalización de la vía para evitar posibles despistes del conductor.
Incidía, además, en que un examen más detenido de las circunstancias conocidas en que se produce el siniestro permite inferir también su conexión con la omisión de medidas de seguridad preventivas de naturaleza vial y, en definitiva, "con una conducta imprudente de las personas responsables de garantizar una circulación segura en el tramo de la vía donde se produjo la catástrofe".
Además, rechazaba imputar a Renfe a petición de un recurso presentado por el exjuez Baltasar Garzón, que ejerce la acusación en nombre de una de las víctimas
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.