Irán propuso cambios el jueves al borrador de un acuerdo mediado por la ONU sobre combustible nuclear, informó la prensa iraní, en una maniobra que parece desafiar la base del pacto con Estados Unidos, Francia y Rusia.

El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA, por sus sigla en inglés) de Naciones Unidas, que había exigido una respuesta para el pasado viernes, dijo que su director, Mohamed ElBaradei, había recibido una "respuesta inicial" de Teherán.

"(El) está comprometido en consultas con el Gobierno de Irán, así como todas las partes relevantes, con la esperanza de que pueda alcanzarse pronto un acuerdo a esta propuesta", precisó a través de un comunicado, sin aportar mayores detalles.

El periódico Javan, sin dar a conocer la fuente, también informó de que Teherán quería un "intercambio simultáneo", que implica recibir combustible para un reactor de investigación de Teherán al mismo tiempo que envía al extranjero el uranio poco enriquecido.

Las condiciones expuestas por el diario Javan probablemente sean inaceptables para los países occidentales, que sospechan que la república islámica busca desarrollar bombas atómicas. Teherán rechaza esa acusación diciendo que su programa tiene como fin generar electricidad.

Según el acuerdo, en el que medió el jefe del organismo de control nuclear de la ONU en unos encuentros mantenidos la semana pasada entre Irán y tres grandes potencias, Teherán transferiría cerca del 75 por ciento de las cerca de las 1,5 toneladas propias de uranio poco enriquecido.

El material sería enviado para un mayor procesamiento a Rusia para finales de este año y luego sería trasladado a Francia para ser convertido en placas de combustible.

Luego volvería a Teherán en donde sería utilizado en un reactor que produce radioisótopos para el tratamiento contra el cáncer.

El papel estadounidense en el acuerdo conllevaría mejoras en la seguridad e instrumentación de la planta, precisaron funcionarios iraníes.

RESPUESTA

Francia estaba esperando la respuesta oficial de Irán antes de contestar.

"Queremos ver que Irán responda clara y positivamente a la propuesta presentada por el OIEA, que cuenta con el total apoyo de Francia, Estados Unidos y Rusia", precisó el Ministerio de Asuntos Exteriores.

Es probable que las enmiendas propuestas por la república islámica sean rechazadas por las potencias, ya que con el plan buscaban reducir el almacenamiento de uranio poco enriquecido de Irán por niveles debajo de la cantidad necesaria para convertirlo en uranio altamente enriquecido para fabricar una bomba atómica.

Esto daría cerca de un año de tiempo para negociar sobre la suspensión del enriquecimiento de uranio en Irán, a cambio de beneficios para forjar una solución de largo plazo a una disputa sobre sus ambiciones nucleares.

Potencias occidentales quieren que Irán detenga su programa de enriquecimiento de uranio a cambio de incentivos económicos.

La contraoferta iraní es problemática porque las actuales sanciones de la ONU prohíben el comercio de materiales nucleares delicados con Teherán, lo que incluye el uranio enriquecido.

Irán se arriesga a reavivar las exigencias por sanciones más severas si no consigue avances en el plan de combustible y otras medidas de transparencia nuclear antes de fin de año, comentaron diplomáticos.

El presidente Mahmud Ahmadineyad dijo que Irán no cederá ni "un ápice" de sus derechos nucleares, pero que está dispuesto a cooperar en temas vinculados al combustible nuclear, plantas de energía y tecnología.

"Afortunadamente, las condiciones han estado preparadas para la coordinación internacional en el terreno nuclear", dijo Ahmadineyad en un discurso en la ciudad de Mashhad, al noreste del país, en una transmisión en vivo de la televisión estatal.