Barcelona, 26 oct (EFECOM).- El hundimiento hoy de más de diez metros de un andén de la estación de Bellvitge al abrirse un gran socavón por causa de las obras del Ave a las puertas de Barcelona ha llevado al Ministerio de Fomento a ordenar la paralización de los trabajos por motivos de seguridad en un tramo de 1,5 kilómetros.

Este nuevo incidente, uno más entre los numerosos percances registrados en esta obra, a cargo de la empresa OHL, junto a la acumulación de retrasos en los plazos previstos, ha llevado al Ministerio a optar por rescindir a la constructora el contrato de ejecución de las obras del AVE en el tramo de llegada a la estación de Barcelona-Sants.

Según indicaron a Efe fuentes conocedoras de esta medida, la decisión se habría tomado tras varias conversaciones mantenidas esta semana entre el presidente de la Generalitat, José Montilla, y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en las que habrían hablado de la necesidad de paralizar los trabajos para garantizar la seguridad.

La paralización de las obras de construcción del túnel del Ave en el tramo L'Hospitalet-Torrassa, y la rescisión del contrato a OHL han dado la puntilla a la fecha anunciada para la llegada de la alta velocidad a Barcelona, el 21 de diciembre, aunque públicamente ningún responsable de Adif o del Ministerio de Fomento ha descartado aún esta posibilidad.

Precisamente hoy el pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha acordado por unanimidad instar al Gobierno español a retrasar las obras del Ave "el tiempo necesario", hasta que los informes técnicos garanticen la ejecución de estos trabajos con plena seguridad.

También en esta línea, el consejo de administración de Adif ha decidido aplazar, como mínimo hasta finales de noviembre, la decisión sobre la adjudicación del túnel del Ave que pasará por el centro de Barcelona, prevista inicialmente para hoy, por causas que no ha explicado.

La decisión de paralizar las obras del Ave, adoptada a instancias del secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, afecta a los trabajos de excavación entre pantallas en el tramo de l'Hospitalet, pero no a las obras de reparación que se ejecutan en el túnel de los Ferrocarriles de la Generalitat que el pasado sábado también quedó afectado por las obras del Ave y que comportó la suspensión del servicio de Cercanías.

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha señalado hoy, sobre la situación en las infraestructuras ferroviarias en Cataluña, que era el momento de "dar soluciones rápidas y seguras".

La decisión se ha tomado después de que sobre las 08.30 horas de esta mañana se haya abierto un gran socavón que ha arrastrado uno de los pilares en los que se apoyaba el andén de la estación de Bellvitge, sin que el suceso haya comportado ningún daño personal, ya que la estación está cerrada como consecuencia de la suspensión del servicio de Cercanías.

Algunas personas que caminaban en ese momento por un puente peatonal que pasa por encima de la estación han explicado que momentos antes han notado un fuerte temblor y al mirar hacia abajo han visto cómo se desmoronaba esta parte del andén, lo que ha provocado momentos de angustia y que algunos de ellos salieran corriendo para alcanzar la calle.

Por lo que respecta a las retenciones de tráfico en las vías de acceso a Barcelona motivadas por el corte de Cercanías, y que ayer derivaron en un colapso monumental al habilitarse un carril bus en la C-31, esta mañana, tras diversas modificaciones en su recorrido, las colas han sido las de cualquier día normal, según el Servicio Catalán de Tráfico (SCT).

Por este motivo el SCT mantendrá la semana que viene los recorridos fijados hoy para el carril de autocares de Renfe y el adicional de la carretera C-31, entre Gavá y Barcelona, al comprobar la mejora en las vías de acceso a la ciudad.