La desmovilización ciudadana como billete a la Moncloa

El PP ha asumido que para caminar a la Moncloa no puede jugar la baza de ilusionar a la ciudadanía, sino de conseguir la desmovilización de los ciudadanos en las urnas. Las distintas encuestas que se publican y el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) demuestran que los populares pierden apoyo y que los votantes no creen en su capacidad para cambiar el rumbo económico del país. Pero la carta que guardan bajo la manga es que los votantes fieles al PP mantienen su voto y el desencanto de los votantes socialistas hunden la popularidad del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

La realidad es que el PP prefiere que el PSOE siga perdiendo votos aunque esos votos no vayan a los conservadores y por eso mantienen un perfil bajo en las propuestas. La consigna es que el foco mediático siga puesto en los ojos del Gobierno y no castigue la imagen del PP. Lo reconocía hoy Esteban González Pons en Punto Radio: "Vamos por delante en las encuestas porque los votantes del PSOE no están satisfechos con Zapatero y los nuestros con el PP, sí".

"No me parece insano que los ciudadanos desconfíen de los políticos", dice Pons

El último sondeo trimestral del CIS, que salió a primeros de febrero, reflejó que la estrategia del PP está teniendo premio: aumentó su ventaja sobre el PSOE de 3,3 a 3,8 puntos. Pero también perdió apoyo electoral. Los votantes no valoran positivamente las medidas del Gobierno, que sale peor parado, pero Pons, que es un viejo zorro de la política, hace el análisis adecuado: el descontento en el electorado popular hacia Rajoy y las propuestas del partido no lo hace huir en desbandada. Mientras el PSOE perdía un punto y medio en estimación de voto, el PP bajaba, pero sólo un punto. A ese ritmo las cuentas le salen a los conservadores.

Por eso, el vicesecretario de Comunicación del PP sigue echando balones fuera cuando se le pregunta por los planes económicos de los conservadores. Su respuesta es que le parece "increíble" que se pida el plan anticrisis de la oposición "cuando no se conoce el del Gobierno".

Al PP le salen las cuentas. En el último barómetro del CIS los dos partidos perdían apoyo, pero el PP menos

Mientras tanto, hay un clima de opinión en la calle que aleja a la ciudadanía de la clase política, ya que la crisis económica arrecia y no parece encontrar respuestas en sus representantes. A Pons esto no le parece mal: "A mí no me parece insano que haya desconfianza en los políticos, lo mejor es que los ciudadanos no se fíen", ha declarado.

Los conservadores no quieren dar pasos en falso, y Pons considera que una moción de censura lo es. Hoy ha vuelto a desautorizar la propuesta que realizó la secretaria general general de su partido, María Dolores de Cospedal, sencillamente por que "el PP no puede ganarla".

"El PP tendría que tener la certeza" de tener el apoyo del Parlamento, ha dicho Pons. Pero lo cierto es que su partido sigue sólo en el Congreso y escenificar esa soledad cambiaría los problemas de imagen del Gobierno por los suyos.

Lo que si ha pedido Pons es que Zapatero se someta a una moción de confianza, porque ahí el PP no tendría que ser apoyado, sólo se votaría a favor o en contra del presidente del Gobierno. Sin embargo, someterse a una moción de confianza es una iniciativa que sólo puede decidir el propio presidente del Ejecutivo.

Esteban González Pons también sabe coger la parte por el todo. "Ha quedado demostrado que el socialismo no funciona en España", ha dicho hoy refiriéndose a la gestión de la crisis que ha realizado el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

El vicesecretario de comunicación del PP cree que el sistema socialista del Gobierno es despilfarrador. "Sobrán muchos ministerios, asesorías y coches oficiales", ha declarado en el programa Protagonistas de Punto Radio.