El Defensor del Pueblo de España, Enrique Múgica, dijo hoy en Lima que el Gobierno debería "decir claramente que no se está negociando con ETA".

Múgica hizo estas declaraciones a Efe en Lima, donde preside el XII Congreso Anual de Defensores del Pueblo de Iberoamérica y donde comentó que "el Gobierno está determinado, y lo está haciendo, a la lucha contra ETA".

"Lo está llevando con tenacidad, no pasa día que no haya detenciones de terroristas o elementos vinculados al terrorismo", agregó.

"Todo lo demás son elucubraciones y no voy a entrar en ello", manifestó Múgica en alusión a informaciones aparecidas en la prensa española sobre eventuales contactos entre el Partido Socialista de Euskadi y ETA.

También se pronunció sobre la manifestación convocada para el sábado por los contrarios a la negociación con ETA.

En este sentido, consideró que se trata de "una manifestación que se convoca en virtud de presunción de algo que no existe (...). Eso califica lo que puede ser esa manifestación".

Sobre el posicionamiento del entorno de ETA de cara a las elecciones generales de marzo, consideró que "si se demuestra de una forma radical y seria que hay concomitancias y vinculaciones de determinados partidos que han participado en contiendas electorales con ETA, se procederá, yo creo, a su ilegalización".

Pero "primero hay que comprobarlo, confirmarlo. Sabíamos que Batasuna era el brazo político de la organización terrorista y fue ilegalizado. Y eso marca una pauta a seguir en todos los aspectos, en relación a todas las organizaciones políticas", matizó.

Múgica dijo, además, que "la campaña electoral se está llevando como se llevan todas las campañas. Es una continuidad de la vida política democrática, hay picos en los cuales los elementos retóricos a veces adquieren un vigor que no tienen en la vida normal de la democracia".

Pero ante todo comentó que "España es un estado sólido, con una democracia que es una de las más poderosas y solidas de Europa".

Sobre la pugna creada por el control del Tribunal Constitucional, el Defensor del Pueblo prefirió no pronunciarse dado que ha presentado un recurso sobre el Estatuto de Cataluña ante ese organismo.

"Ello me obliga a tener una máxima prudencia, sobre la que se solapa el enorme respeto que debemos tener todos por el Tribunal Constitucional".

No obstante, hizo un llamamiento a la cordura, especialmente a los medios de comunicación, porque -a su juicio- "se está haciendo un flaco servicio al Constitucional".