El Bizkaia Bilbao Basket recibirá mañana al Real Madrid en el Bizkaia Arena (18:00 horas) con la intención de romper una racha de cuatro derrotas consecutivas, tres en ACB y otra más en la previa de la Eurocopa, sumando una victoria de calidad ante uno de los principales aspirantes al título.

El equipo vizcaíno sólo ha sido capaz de ganar el primero de los cinco encuentros oficiales que ha disputado, en casa frente al Granada, en un estreno que ratificó las buenas sensaciones desprendidas durante la fase de preparación y que en absoluto hacía presagiar la tendencia negativa iniciada poco más tarde.

Desde aquel debut, Caja Laboral, Fuenlabrada, Donetsk y Manresa han bajado bruscamente a la tierra a un Bizkaia en el que nadie oculta que se ha instalado ya la "preocupación" por este irregular comienzo de temporada.

"Ha llegado la hora de demostrar en la cancha que somos mejores y de momento no lo estamos demostrando", ha lamentado el técnico, Txus Vidorreta, que podrá contar mañana con toda su plantilla, incluido Chris Warren, prácticamente recuperado del fuerte golpe que sufrió en el pecho en un entrenamiento de esta semana.

También formará parte de la rotación bilbaína Alex Mumbrú. El alero catalán se enfrentará por primera vez a su ex equipo mermado por una fascitis plantar que le hace jugar "mordiéndose el labio inferior para aguantar el dolor y ayudar al equipo", según ha destacado Vidorreta, encantado con la "integración" de Mumbrú en la dinámica del grupo.

Uno de los argumentos a los que trata de agarrarse el Bizkaia para convencerse de sus opciones es la última referencia frente al equipo blanco. El pasado 28 de febrero el equipo bilbaíno derrotó al Real Madrid por primera vez en su historia en partido oficial (88-81) con un Damir Markota arrollador en el cuarto final.