Para el presidente de la Generalitat, Artur Mas, 'silenciar la voz de un pueblo que quiere hablar es un error'. 'Y negar el voto a quien ve en las urnas la solución y no el problema es un error doble'. Así se ha expresado el jefe del Ejecutivo catalán en el mensaje institucional con motivo de la Diada que se celebra este jueves en Catalunya. Tras dos años de manifestaciones masivas por el derecho a decidir, Mas ha avanzado que los catalanes evidenciarán una vez más que 'la mayoría social que hace posible el proceso político que vive Catalunya no desfallece, sino que sigue más viva y fuerte que nunca'.

'Mi compromiso para convocar la consulta es firme', ha insistido Mas, quien ha recordado también que el pueblo catalán 'no quiere imponer una decisión', sino que 'quiere ser escuchado, quiere hablar, quiere votar y quiere llegar a buenos acuerdos para todo el mundo'. El presidente de la Generalitat ha remarcado que en esta lucha por el derecho a decidir a los catalanes no les mueve 'el afán de ser mejores que los demás, sino de ser mejores ellos mismos'. 'La aspiración del pueblo es tener un futuro mejor, que pasa por la concordia y la solidaridad con el resto de pueblos de España y de Europa', ha concluido.

Desde el Saló Sant Jordi de la Generalitat, donde en 1713 se tomó la decisión de defender las Constituciones Catalanas y resistir en Barcelona hasta que entraron las tropas borbónicas el 11 de septiembre del año siguiente, Mas ha reivindicado la necesidad de 'conmemorar lo que Catalunya ha sido' en momentos como éste en los que, según él, 'se quiere menostener, desvirtuar e incluso negar' el pasado de Catalunya como país. El jefe del Ejecutivo catalán ha recordado además que las Cortes Catalanas convocadas por el archiduque Carlos y creadas en el siglo XIII son consideradas 'el nacimiento del primero parlamentarismo de Europa'. 'Nuestro sentido de la democracia viene de lejos', ha añadido el president.

El proceso político catalán se sustenta, ha seguido Mas, en 'la mayoría social y el consenso político' que, según el presidente, vertebran 'el futuro colectivo de Catalunya'. Una unidad que desea no sólo que no se rompa, sino que se amplíe. 'Anhelamos ser tratados como las otras naciones del mundo y, por lo tanto, decidir por nosotros mismo sobre nuestra economía, nuestro bienestar, nuestros servicios públicos, nuestra identidad y la forma de relacionarnos con las otras regiones de Europa y el mundo', ha sentenciado. 

Por todo ello, Mas ha invitado a los ciudadanos de Catalunya a 'proyectar la mejor realidad del país': 'La Catalunya convivencial, cívica, culta, respetuosa, tolerante e integradora; y la Catalunya comprometida con la justicia social, fiel a su tradición dinámica, emprendedora y creativa y amante de la libertad y de las libertades'.