Corea del Norte ha reconocido que el cohete de largo alcance Unha-3, que lanzó hoy desde la base de Tongchang-ri, al norte del país, no ha logrado su objetivo de poner un satélite en órbita.

El satélite 'no logró entrar en órbita' y científicos, técnicos y expertos norcoreanos 'investigan en estos momentos la causa del fracaso', según ha informado la televisión estatal norcoreana KCTV.

El lanzamiento tuvo lugar a las 07:38 hora local, 22:38 GMT del jueves, y según Estados Unidos, Corea del Sur y Japón el proyectil se precipitó en el Mar Amarillo a los dos minutos de su partida. El cohete, de 91 toneladas y una longitud de 30 metros, cayó en aguas a entre 100 y 150 kilómetros de la ciudad portuaria surcoreana de Gunsan, al oeste del país, tras sufrir un aparente problema cuando la primera etapa debía separarse del resto.

Una autoridad militar surcoreana concretó que el cohete se desmembró en unas 20 piezas tras alcanzar una altitud máxima aproximada de 151 kilómetros antes de caer el mar.

El Gobierno de Corea del Sur calificó el lanzamiento de 'una provocación' que viola la resolución 1874 de la ONU, que exige la renuncia de Pyongyang a todos los ensayos que utilicen tecnología de misiles balísticos.

Tanto Estados Unidos, como Japón y Corea de Sur calificaron este lanzamiento como un fracaso. En una conversación telefónica, los ministros de Exteriores de Corea del Sur y EE.UU., Kim Sung-hwan y Hillary Clinton, acordaron dar una respuesta 'decidida' a Corea del Norte tras el fracasado ensayo de hoy.

El régimen norcoreano ya había experimentado dos lanzamiento similares, en 1998 y 2009, y lo definieron como exitoso a pesar de que gran parte de los expertos internacionales aseguraron que los satélites norcoreanos nunca llegaron a entrar en órbita. Por lo tanto, esta es la primera vez que el régimen norcoreano reconoce el fracaso en su intento de lanzar al espacio un satélite.