Público
Público

El PP reconoce que las manifestaciones en la calle “se agotan” tras la investidura de Sánchez

“Después de la investidura de Sánchez ya no tenemos el mismo poder de convocatoria, todo se desinfla y es difícil mantener esto”, reconoce un dirigente del PP.

Alberto Núñez Feijóo, este sábado en la manifestación contra la amnistía en Madrid. EFE/ Borja Sánchez-Trillo

Amanda García

El Partido Popular da por amortizadas las protestas en la calle tras la manifestación contra la amnistía de este domingo en Madrid. Fuentes del partido a todos los niveles reconocen a Público que, tras el éxito de la investidura de Pedro Sánchez, “es casi imposible” mantener la ofensiva en la calle, aunque seguirán intentándolo a nivel autonómico. Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal han hablado este fin de semana para coordinar una “respuesta institucional” a la nueva mayoría parlamentaria de Sánchez, según ha informado La Sexta y ha confirmado Público.  

PP y Vox, derecha y extrema derecha, han coincidido este sábado en una manifestación en la madrileña plaza de Cibeles convocada por un centenar de asociaciones próximas ideológicamente, en la que, según Delegación de Gobierno han participado 170.000 personas —más del doble de las que cifraron el pasado domingo en la manifestación del PP en la Puerta del Sol—, y, según la organización, han sido un millón. 

El PP ha acudido en masa a esta concentración con una amplia representación de la cúpula de Génova y de su poder territorial —Isabel Díaz Ayuso (Comunidad de Madrid), Fernando López Miras (Murcia), Jorge Azcón (Aragón), Alfonso Fernández Mañueco (Castilla y León), Javier de Andrés (País Vasco), Paco Núñez (Castilla La-Mancha), Cuca Gamarra, Elías Bendodo, Esteban González Pons, Carmen Fúnez, Juan Bravo o Pedro Rollán—, pero varios de los presentes aseguran a este periódico que sus sensaciones es que “esto se agota”. 

“Después de la investidura de Sánchez ya no tenemos el mismo poder de convocatoria, todo se desinfla y es difícil mantener esto”, reconoce un dirigente del PP. Una reflexión que comparten buena parte de los altos cargos del partido. Además, entre los populares hay voces que empiezan a señalar que al partido “no le beneficia” figurar tanto en una ofensiva en la calle vinculada a mensajes ultras como “Sánchez a prisión” o “Pedro Sánchez hijo de puta”. Gritos que se escucharon el pasado domingo en Sol ante el silencio cómplice de Feijóo y Ayuso, y se repitieron este sábado en Cibeles. 

Así, en el PP creen que el poder de convocatoria en la calles irá a menos, pero siguen apuntando a una “oposición dura” que exprima los principales pilares del poder que tienen en este momento: comunidades autónomas y Senado. En el primer caso, Vox presionará para coordinar ofensivas a nivel gubernamental. Es decir, usar políticamente las instituciones.

Y, aunque los populares no acaben de sentirse cómodos con sus socios, el PP no termina de distanciarse de ellos y hace equilibrios comprando los discursos más duros de la derecha e intentando mantener la agitación en las calles, pero sin ponerse al frente. “No nos vamos a cansar de denunciar este tipo de atropello”, dijo Feijóo este sábado al tiempo que Abascal insistía en la “movilización permanente” y Fernando Savater, filósofo invitado a la protesta, hablaba de la “resistencia” al próximo Gobierno progresista.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias