Barack Obama, el expresidente de Estados Unidos, ha criticado que "no se ha hecho lo suficiente para combatir el cambio climático", por lo que ha hecho un llamamiento para llevar a cabo una acción "unida". Ha pedido a los países intensificar de manera urgente la acción contra el cambio climático, en concreto a los estados insulares, que ha definido como "canarios en una mina de carbón". 

En su intervención una conferencia en el marco de la COP26 que esta teniendo lugar en Glasgow (Reino Unido), el expresidente ha reclamado a las potencias mundiales que arrimen más el hombro para afrontar la crisis climática. Además, ha insistido en la importancia de apoyar a los países más pobres a lidiar con el problema. "Todos nosotros tenemos una parte que jugar, todos nosotros tenemos que trabajar y todos nosotros tenemos sacrificios que hacer", ha reflexionado.

Obama ha insistido en la responsabilidad aquellos que viven en las naciones más ricas, considerando que "los que han ayudado a agravado el problema deben asegurar que se trabaja, ayuda y asiste a aquellos que tienen una menor responsabilidad y menor capacidad de acción", que al mismo tiempo, son los más vulnerables en esta crisis venidera.

Además, ha aludido a su sucesor, Donald Trump, afirmando que este no está tan interesado en la ciencia climática como él. Aun así, ha señalado que hay muchas personas en el Gobierno de Estados Unidos que se preocupan realmente de este asunto y que "trabajan muy duro".

El expresidente se dirigió también a los jóvenes de todo el mundo, que a su juicio aportan "la energía más importante de este movimiento". "La cruda realidad es que no tendremos planes más ambiciosos de los gobiernos, a no ser que estos sientan la presión de sus votantes", añadió.

Rusia y China "carecen de la urgencia necesaria"

Obama ha criticado a China y Rusia, dos de los mayores emisores de carbono, por la "peligrosa falta de urgencia" en sus planes para actuar contra el cambio climático. Ha confesado su decepción al ver como los líderes de estos países declinaban la invitación a las negociaciones. Además, asegura que sus planes nacionales, hasta ahora, "parecen reflejar una peligrosa falta de urgencia".