Con un 'no' rotundo a la elección directa de alcaldes. Así ha recibido la mayor parte de los grupos parlamentarios de la izquierda las propuestas de 'regeneración democrática' del Gobierno de Mariano Rajoy. La medida es una línea roja infranqueable para algunos de ellos, como el PSOE, y casi imposible de traspasar para otros como Compromís-Equo, BNG, Geroa Bai o ERC. La Izquierda Plural, por su parte, rechaza en bloque todo lo anunciado por el PP hasta el momento, al considerar que un partido que no ha dado explicaciones parlamentarias del encarcelamiento de su tesorero no está legitimado para hablar de democracia.

El tema ha centrado este martes la reunión de la Junta de Portavoces del Congreso, en la que el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, ha anunciado al resto de grupos que su intención es empezar la ronda de contactos a partir de la próxima semana. Pero, de momento, los únicos partidos dispuestos a escuchar 'sin prejuicios' las propuestas del PP son UPyD y Foro Asturias.

Así lo ha expresado esta mañana la portavoz de la formación magenta, Rosa Díez, que ha criticado la postura de PSOE e IU al respecto y ha señalado que su partido no buscará 'excusas' para no acudir a la negociación propuesta por los conservadores. Fuentes del partido presidido por Francisco Álvarez Cascos, por su parte, han confirmado también que sí están dispuestos a sentarse a escuchar lo que el PP tenga que decir.

Del otro lado están los socialistas, cuyo secretario general, Pedro Sánchez, ha puesto tres condiciones al Ejecutivo para que la reunión con el principal partido de la oposición llegue a producirse: que retire definitivamente la contrarreforma de la ley del aborto propuesta por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y la ley de seguridad ciudadana, y que no ponga sobre la mesa la reforma electoral local para que gobierne el alcalde más votado. 

El portavoz de la Izquierda Plural, José Luis Centella, no acudirá a la reunión ni siquiera con condiciones. 'El PP sólo quiere marear la perdiz para ocultar la realidad: que su tesorero [Bárcenas] sigue en la cárcel', denunció. Centella considera que los conservadores 'no tienen autoridad política ni ética para hablar de regeneración democrática mientras tienen a su tesorero en la cárcel y no han explicado los motivos en el Parlamento', agregó. Además, consideran la reforma electoral 'un golpe para que haya menos democracia en los ayuntamientos', por lo que no serán 'cómplices' de lo que consideran un intento de 'ganar en el Parlamento lo que no van a ganar con la ciudadanía en las urnas'.

En medio de las dos posturas se encuentran Compromís-Equo, BNG, Geroa-Bai, Amaiur, ERC, PNV y Coalición Canaria que, si bien están dispuestos a escuchar lo que el PP tenga que decirles sobre limitar el aforamiento o regular los indultos, ven difícil consensuar un gran pacto de reforma electoral. Así, tanto para el diputado de Compromís Joan Baldoví, como para los gallegos del Bloque Nacionalista Galego y los vascos de Geroa-Bai la elección directa de alcaldes es totalmente 'innegociable' mientras que en Amaiur y Esquerra Republicana de Catalunya consideran 'muy complicado' poder debatir con los conservadores en este aspecto.

Desde el PNV, por su parte, solicitan al Gobierno medidas concretas que no les lleguen a través de los medios de comunicación pero también consideran de 'difícil negociación' el punto electoral. Y Ana Oramas, de Coalición Canaria, cree que la reforma de la ley local tiene que llevarse a cabo 'con un amplio consenso' y no responder 'a intereses partidistas y electorales'. Desde CiU mantienen una posición parecida, al insistir en que debates de este tipo deben llevarse a cabo 'en sede parlamentaria y no a través de los medios de comunicación', por lo que prefieren no responder si negociarán o no con el PP hasta que no haya una invitación oficial por parte de los conservadores.

En cualquier caso, la mayoría de los grupos consultados [este diario ha intentando sin éxito obtener también la opinión de UPN] coinciden en que esperan la convocatoria oficial de reunión por parte de Gobierno y PP para poder concretar mejor sus posiciones sobre su 'regeneración democrática'. Según el Ejecutivo, esta situación se dará a partir de la próxima semana y seguirá, como ya anunció Rajoy en la apertura del curso político, durante los dos próximos meses.