Las fiestas de San Fermín han vuelto a convertirse en un foco de violencia contra las mujeres. La celebración pamplonesa suma ya 15 denuncias y 11 hombres detenidos por agresiones sexuales, justo en una semana trágica en la que cinco mujeres han sido asesinadas por parejas o exparejas. Con los últimos casos, suman 28 los asesinatos machistas en lo que va de año.

Sobre las inquietantes cifras en cuestión de violencia de género, el vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior del Gobierno de Navarra, Javier Remírez, ha advertido de que "cualquier acto de agresión sexual, cualquier mínima expresión machista, tiene que ser condenado profundamente, como lo es por parte del Gobierno Navarra y todas las administraciones".

En esta misma línea, el Movimiento Feminista y el Ayuntamiento de Pamplona convocaron este lunes una concentración para rechazar y denunciar las agresiones sexuales ocurridas durante San Fermín.

La protesta, encabezada por la alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola, se llevó a cabo con la idea de mostrar apoyo a la última víctima de violencia machista durante los Sanfermines, agredida el pasado sábado en una vivienda por un joven que ha sido puesto en libertad con una orden de alejamiento.

Al ser preguntado acerca de la tardanza del dictamen por parte de los juzgados ante una denuncia, Remírez contestó que el juzgado de guardia de Pamplona trabajaba lo más rápido posible y recordó que el "próximo 1 de enero Navarra contará con un nuevo juzgado de violencia de género".

En el manifiesto leído durante la concentración del lunes recordaron que las mujeres también tienen derecho a disfrutar las fiestas: "Estamos hartas de quienes piensan que las fiestas son solo para ellos, de quienes creen que nosotras no tenemos cabida; nos tenéis hasta las narices, lo hemos dicho de mil maneras, y lo volvemos a decir: no vamos a tolerar ninguna agresión machista".

Un escenario delictivo

Pamplona también ha sido objeto de diversas agresiones a profesionales de la Cruz Roja, sanitarios y periodistas. El vicepresidente primero ha pedido a la ciudadanía "respeto a estos trabajadores que, junto con otros, están sacrificándose para que el resto de la ciudadanía disfrutemos de las fiestas".

Y es que estos días suelen suponer un aumento de los delitos en la ciudad a nivel general. El 80% del total de denuncias contabilizadas en los Sanfermines se trata de hurtos, sobre todo de teléfonos móviles. Además, del 6 al 9 de julio, la Policía Foral ha registrado un 27% de denuncias más y ha incrementado las detenciones en un 100%.

Cabe destacar que durante dicho periodo se contabilizó una afluencia de personas notablemente mayor respecto al mismo intervalo temporal del pasado año, con el correspondiente aumento también de llamadas al 112.