Cem Özdemir (1965) sostiene que Angela Merkel no toma las decisiones necesarias para hacer frente a la crisis porque su coalición se desmoronaría y perdería unas elecciones anticipadas. Quizá tiene razón, pues su Alianza 90/Verdes, ya supera incluso al socialdemócrata SPD en intención de voto.

¿Cuál es la receta para que un partido verde pueda aspirar a ganar unas elecciones?

Hemos gobernado en coalición siete años y la gente ha visto que las empresas no se han ido... Al principio había ese temor; los conservadores decían que la economía se colapsaría. Nada de eso ocurrió. Hemos demostrado que podemos gobernar un país y que no estamos locos, que los miedos que otros tratan de imponer son falsos. Para ganar necesitas credibilidad y huir de debates marginales.

En España, ni las protestas de los indignados han mejorado las perspectivas de la izquierda.

Es irónico que los conservadores se estén beneficiando de la crisis actual. Los partidos de centro izquierda que gobiernan tienen que convencer a su gente de la necesidad de hacer determinados sacrificios. Pero que la juventud que protesta contra los gobiernos llame a la abstención es muy triste, empeora las cosas, ayuda a que haya un Gobierno más neoliberal. En Alemania, ayudó a nuestra fundación había muchos movimientos sociales decepcionados con la socialdemocracia que buscaban respuestas y se unieron bajo el paraguas verde. España necesita lo mismo, un partido fuerte verde que esté representado a nivel regional y nacional.

¿Qué le parece Equo?

Sería bueno para España tener una voz verde en el próximo Congreso y espero que estas elecciones ayuden a nuestro amigo de Greenpeace [Juan López de Uralde, portavoz de Equo] a formar un nuevo movimiento que nosotros apoyaremos tanto como podamos. ¿Cómo se pueden unir a otros movimientos? Es cosa de ellos, pero les ayudaremos en todo lo que podamos, es importante para España y para Europa que haya una voz fuerte ecologista, también pensando en las elecciones europeas.

¿Ese apoyo incluye ayuda económica?

Eso no es ciertamente algo de lo que hablemos en los medios. Si es necesario, hablaremos sobre ello, pero primero creo que es importante que se sepa que luchamos por los mismos ideales. Lo verde tiene que impregnar algunos países como España y romper tabús. Se dice que la derecha es disciplinada y la izquierda no, pero la gente nos compara con el Gobierno conservador y ve que ahora tienen una pelea cada día, que no se ponen de acuerdo en nada Comparados con ellos, fuimos el Gobierno más disciplinado de la historia de Alemania.

La historia de su partido está llena de escisiones.

En estas polémicas perdimos la mayoría de nuestro tiempo y en el momento en que las dejamos atrás y nos concentramos en nuestros programas y oponentes, comenzamos a ganar. Si hay algo que pueden aprender de la experiencia alemana es que no hay que perder tiempo en discutir sobre marcas. Hay que concentrarse en los problemas de la gente, y los problemas de la gente no son las teorías. Los resultados de ahora los habríamos podido tener años antes.

¿Por qué es tan difícil para los estados ceder poder a las instituciones comunitarias?

Desgraciadamente, mucha gente subestima el Parlamento europeo, es uno de los más infravalorados de Occidente. Por eso critico a Merkel y Sarkozy cuando hablan de gobernanza europea, algo que apoyo pero que no se puede hacer sin un Parlamento. ¿Dónde está el control, dónde está el equilibrio? En el terreno social, la gente siente que los representantes de sus países son mejores que los de Bruselas, que están lejos, y no les conocen ni la cara. Para darle un rostro a Europa habría que lograr que existiera un presidente al frente del Consejo y de la Comisión Europea, controlado por el Parlamento europeo y elegido por los ciudadanos. Eso haría que hubiera la misma campaña en España, Alemania o los estados bálticos. Pero los estados miembros, y particularmente Alemania, cuando tienen que elegir candidatos para estas instituciones no quieren personas potentes, piensan que cuanto menos poder tenga Bruselas, mejor para ellos. Y es justo al revés.

Usted sostiene que Merkel piensa más en Alemania que en Europa.

Sólo piensa en conservar su coalición, en que los liberales no la rompan, cosa que ocurriría si accede a emitir eurobonos. Eso provocaría un adelanto electoral que nos daría el poder. Ya sabemos que no es rápida tomando decisiones, necesita un tiempo que no tenemos.

¿El fin de las nucleares llegará con nuevos Fukushimas?

Ojalá Fukushima no nos hubiera dado la razón. En Alemania el debate sobre la energía nuclear se centra en la seguridad, en el resto de países hay discusiones pero se centran en la economía y la energía nuclear es extremadamente cara, no hay centrales privadas, sólo existen con intervención de los estados y en el tiempo hace falta una década para constuir una central. Suiza ha votado contra la energía nuclear, también Italia, Alemania Los pronucleares están muy preocupados. Siempre repiten los mismos argumentos: 'Faltaría energía sin las centrales'. Pues bien, nosotros cerramos ocho en un solo día y, ¿adivina qué pasó? Nada. Los precios tampoco han crecido como decían No quieren que las renovables ganen la batalla, pero no hay manera de frenar a las renovables.

¿Como hijo de inmigrantes, qué piensa del auge de los partidos xenófobos en Europa?

Invocan al miedo: el miedo al islam, a los inmigrantes, a Europa Pero me preocupa aún más ver cómo otros partidos alteran su programa para ser más populistas.