El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha defendido el desarrollo de las explotaciones petrolíferas en las Islas Canarias ya que 'no solo es compatible con el sector turístico sino que puede potenciarlo, como ha ocurrido en países como Arabia Saudí, que cuenta con una de las mejores infraestructuras hoteleras del mundo gracias a que parte de los recursos generados por el petróleo se han destinado al turismo.

El Gobierno de Paulino Rivero y los Cabildos de Fuerteventura y Lanzarote, todos de Coalición Canaria (CC), llevan meses expresando su oposición a los trabajos de búsqueda de hidrocarburos que el Consejo de Ministros ha autorizado a Repsol en el Atlántico, a unos 60 kilómetros de las islas. El titular de industria cree que lo que están haciendo algunas fuerzas políticas ante las prospecciones petrolíferas de Repsol en Canarias es un 'rechazo de pose' porque saben que generaría una riqueza extraordinario para la región.

El ministro ha defendido las oportunidades que puede traer para las islas, cuya economía depende casi exclusivamente del turismo, el hallazgo de hidrocarburos, puesto que generaría capacidad de trabajo en el sector logístico, la industria, la hostelería o el comercio. 'El único miedo que debe tener la gente es que toda una generación de canarios no encuentre la oportunidad de tener un empleo', apunta Soria, que es natural de Canarias.

Soria no cree que su defensa de las explotaciones perjudique al resultado electoral del PP

'Hay que adoptar una posición de mucha sensatez. No puedes jugar con meter temor cuando estamos jugándonos oportunidades', subraya el ministro, convencido de que su defensa de las prospecciones petrolíferas no perjudicará el resultado electoral del Partido Popular en esa comunidad autónoma.

Sobre un eventual regreso a la política canaria, Soria apunta que le 'apetece' culminar su proyecto en el Ministerio de Industria y la agenda que le ha encomendado el Gobierno, pero que siempre hará lo que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el partido le diga. 'Esto de la política es como un sacerdocio. Uno siempre está a lo que diga el partido', afirma.