Mientras cientos de miles de personas se concentran en 57 localidades en España convocados por CCOO y UGT y como respuesta a la reforma laboral impulsada por el Gobierno, el PP asiste a la clausura de su 17 Congreso en Sevilla.

Desde allí, la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, ha expresado su 'respeto' al derecho de manifestación, puesto que es un derecho constitucional que garantiza que 'todo el mundo' tiene derecho a expresarse. Sin embargo, ha añadido, mientras tanto lo que le corresponde al Gobierno es trabajar y hacer 'las reformas necesarias para crecer y volver a crear empleo'. 'Es la tarea a la que está dedicado el Ejecutivo', ha dicho Sáenz de Santamaría. 

En la misma línea, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha opuesto las protestas a 'lo básico': 'generar empleo y recuperar la capacidad de crecimiento' de la economía española.

Durante su discurso en Sevilla, Mariano Rajoy ha calificado el nuevo marco para el empleo como la reestructuración de una legislación que 'data de hace más de 30 años' y frente a las protestas, ha preguntado: ¿Y qué les decimos a los jóvenes que no saben qué es perder un empleo porque nunca lo han tenido?¿Y a los abuelos, qué le decimos?'. Para el presidente del Gobierno, que sabe que 'hay gente que no quiere la reforma laboral', su deber es 'preocuparse por todos los españoles'. 'La reforma laboral piensa en toda esa gente que está en la cola del paro y no ve ningún futuro' y pretende que 'España no sea el país de Europa que más empleo destruye', ha asegurado.

Los responsables sindicales han pedido al Gobierno abrir 'ya' el proceso de negociaciones y han advertido de que de no hacerlo se producirá 'una escalada del deterioro del clima social'. Sin embargo, no han querido mencionar la posibilidad de una huelga general.

Antes de que comenzase la manifestación, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, que se mostraba convencido de que la participación iba a 'ser contundente en términos democráticos', subrayaba que el objetivo de las protestas 'no es el de confrontar', sino el de 'corregir en profundidad' el marco propuesto por los conservadores.

En este sentido, el líder de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha añadido que se trata de 'abrir un cauce democrático' para modificar la nueva legislación laboral. 'El Gobierno tiene en su mano lo que suceda a partir de ahora', ha señalado Toxo, que quiere que el Ejecutivo haga lo 'que tenía que haber llevado a cabo antes del real decreto'.

Carme Chacón ha acudido a la manifestación de Barcelona.-Alberto Estévez/EFE

Al término de la concentración en la Puerta del Sol, los portavoces del área de Juventud de los sindicatos han leído un manifiesto contra la reforma laboral. De ella, han dicho que 'su objetivo es colocar el mercado de trabajo al servicio de los empresarios y desregular las relaciones laborales'. Durante la lectura del discurso, algunos de los indignados que se han unido a la marcha en 'un bloque crítico' han silbado a los sindicalistas, algo que se ha repetido en diferentes ocasiones, cuando distintos colectivos se han dedicado a abuchear a los líderes de los partidos políticos y a los representantes de UGT y CCOO, al encontrarse con ellos.

A la marcha, secundada por todas las formaciones de izquierda, ha acudido, entre otros dirigente políticos, el coordinador general de IU, Cayo Lara. En la manifestación de Madrid, ha avisado de que 'no parará' de apoyar las movilizaciones hasta 'hacer entrar en razón al Gobierno'.

'Se trata de un ataque feroz a los derechos de los trabajadores que destruye empleo después de crearlo, devalúa los salarios y le da todo el poder al empresario', ha dicho sobre la reforma laboral, antes de apuntar que, en los próximos días, su partido buscará apoyos entre los grupos parlamentarios para presentar un recurso de inconstitucionalidad contra el real decreto.

También se ha podido ver liderando la manifestación de la capital a la portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Soraya Rodríguez, o al ex ministro de Trabajo Valeriano Gómez. 

En Barcelona, han acudido en representación del PSC su primer secretario, Pere Navarro, acompañado de la dirigente socialista y exministra de Defensa, Carme Chacón, así como de los dirigentes Miquel Iceta y Joan Rangel. De ERC han acudido al acto su presidente, Oriol Junqueras, flanqueado por los diputados republicanos en el Congreso Joan Tardà y Alfred Bosch, entre otros. Por ICV-EUiA han acudido sus máximos dirigentes, Joan Herrera y Jordi Miralles.