Jóvenes promesas del arte han vestido por primera vez con grafitis las paredes del nuevo aparcamiento del hotel Santo Domingo de Madrid, en el distrito Centro, y han logrado transformar un espacio gris y sin vida en otro repleto de color, naturaleza y con un mensaje a favor del medio ambiente.

Durante una visita a este espacio único de la ciudad, el director de Márketing del hotel, Antonio Núñez, ha explicado a Efe que la idea de que "grafiteros" decoraran el lugar surgió al iniciar la reforma de sus instalaciones y con la idea de "hacer un hotel nuevo cercano a la cultura y distinto" en el centro de Madrid.

Tras convocar en el mes de noviembre un concurso, se escogieron cuatro de los 32 proyectos presentados para decorar las plantas del aparcamiento, 600 metros cuadrados de pared.

Las propuestas ganadoras debían versar sobre el Metro, la naturaleza o un tema libre, y se calcula que en un mes todas las obras estén terminadas.

En la primera planta del párking, los conductores que se adentren en él podrán contemplar el mural ganador del certamen, una verde y llamativa jungla, con gorilas que parecen meterse dentro del vehículo.

"Pretendíamos hacer un paralelismo con lo que es la jungla de Madrid", ha dicho el autor de la obra, Juan Avellano, muy orgulloso de haber ganado el concurso, por el que también recibirá una compensación económica.

Ha elegido pintar gorilas porque "son los que más se mueven en sociedad", ha asegurado.

Una planta más abajo, los clientes del hotel y cualquier otra persona que use el aparcamiento podrá subirse a bordo de un Metro de Madrid muy particular, ya que combina vagones modernos con los más antiguos.

El portavoz del grupo autor del mural "Metro enroscado", Antonio José Cuenta, ha señalado que su intención es mostrar la evolución del Metro a lo largo de la historia, desde los trenes de mercancía más antiguos hasta nuestros días.

El mural "tiene elementos cómicos, dinámicos que ponen de manifiesto cómo ha cambiado este medio de transporte", ha apuntado el joven, acompañado de su equipo de pintores, todos artistas y con muchas ganas de enseñar su arte al gran público.

El Metro está presente en todos los rincones del subterráneo porque "es uno de los grandes valores de la ciudad", ha añadido Núñez.

Los conductores también van a tropezar dentro del párking con niños gigantescos que, como ellos, juegan a los coches, ha asegurado su autora, Marta Montero, que pretende que el usuario recuerde los juegos de su infancia y lo "ridículo" que puede resultar moverse en coche.

En la última planta, uno puede sumergirse en el fondo del mar, en un extenso mar lleno de peces que intentan salir a la superficie.

Es el mural titulado "El gran azul", "un homenaje al mar que no tiene Madrid, al mundo submarino en las profundidades del garaje", ha informado uno de sus pintores, Jesús Bermejo junto a su compañera, Gloria Cabrejas.

"Queríamos hacer un entorno que fuera placentero para el usuario, donde se sintiera agusto", ha apuntado este artista urbano.

Para sumergir al usuario en las profundidades, los pintores han usado una gama de colores "agradable", del amarillo más suave al azul más dulce.

En opinión del ganador del concurso, la idea "es un punto a favor de lo que es el hotel y de los párking en general" y contribuirá a que el universo del grafiti sea más cercano al ciudadano.

No obstante, ha reconocido que va a ser difícil acabar con la relación entre grafiti y gamberrada.