Decenas de miles de personas han secundado esta tarde la manifestación de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) en Madrid, oficialmente convocada para pedir la ilegalización de ANV y el EHAK-PCTV y que se ha convertido en una denuncia de la "traición" del Gobierno a las víctimas de ETA.

Un portavoz de la Comunidad de Madrid ha cifrado en 550.000 personas la asistencia a la marcha, aunque sin explicar el método de cálculo; mientras que la Delegación del Gobierno en Madrid ha afirmado que en la manifestación han participado 76.875 personas, según el recuento hecho por la Policía tras dividir el recorrido en sectores y establecer el nivel de ocupación de cada uno.

El recorrido, entre la glorieta del Pintor Sorolla y la plaza de Colón, ocupaba un total 196.186 metros cuadrados, por lo que un nivel de ocupación máximo -que es de cuatro personas por metro y que equivale a una manifestación parada y sin que los participantes en ella tengan apenas posibilidad de moverse- hubiera dado una asistencia de 784.000 personas.

La manifestación, que ha discurrido bajo el lema de "Por un futuro en libertad. Juntos, derrotemos a ETA", ha arrancado a las 17:00 horas entre gritos que exigían la dimisión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

En la cabecera estaban el presidente de la AVT, Francisco Alcaraz; y dos víctimas del terrorismo como José Antonio Ortega Lara, el funcionario de prisiones que estuvo 532 días secuestrado por ETA; y María del Mar Blanco, hermana del concejal del PP en Ermua (Vizcaya) Miguel Ángel Blanco, asesinado por la banda.

Unos metros más atrás marchaban los políticos, casi todos del PP, como Ángel Acebes, Eduardo Zaplana, Ignacio Astarloa y Soraya Sáenz de Santamaría; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; la concejal del Ayuntamiento de la capital Ana Botella y el ex ministro del Interior Jaime Mayor Oreja.

También habían una nutrida representación del PP del País Vasco, con su presidenta, María San Gil; la alcaldesa de Lizartza, Regina Otaola; y otros cargos como Antonio Basagoiti y Carlos Iturgaiz.

Todos ellos han coincidido, en sus declaraciones a los periodistas, en reprochar al Gobierno y al PSOE su ausencia de la manifestación.

"Es sorprendente que el PSOE no pueda suscribir este lema" (Juntos, derrotemos a ETA), ha señalado Acebes, mientras que Zaplana añadía: "no entiendo cómo puede ser que no haya un apoyo unánime a las víctimas del terrorismo".

A la manifestación también asistieron Rosa Diez, líder de Unión, Progreso y Democracia, y Albert Rivera, presidente de Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía.

Las alusiones al Gobierno también han sido mayoritarias en los lemas coreados por los asistentes a la marcha, entre los que los de "Zapatero embustero" y "Zapatero, dimisión" han sido más que los dedicados a ETA, mientras que no se ha escuchado apenas ninguno referido al motivo oficial de la marcha, la exigencia de ilegalización de ANV y del EHAK-PCTV.

Este asunto sólo ha aparecido, y muy brevemente, en los discursos pronunciados en el acto con el que ha concluido la movilización por Alcaraz -que ha dicho que el Gobierno "tiene la responsabilidad, política y moral, de echar de las instituciones vascas, de manera inmediata, a los proetarras"-, Ortega Lara y María del Mar Blanco.

Sus intervenciones han estado dedicadas casi en exclusiva a denunciar la "traición" que, en su opinión, cometió el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con las víctimas del terrorismo durante toda la legislatura.

Así, Alcaraz se ha referido al "siniestro y vergonzante proceso de rendición" del Gobierno ante ETA y ha dicho: "ni el Gobierno que tenemos, ni Gobiernos futuros, pueden vender la dignidad de todos los españoles cediendo ante el chantaje de una banda asesina".

Ortega Lara, por su parte, ha afirmado que las víctimas del terrorismo "son ahora relegadas al olvido y a la marginalidad porque no aceptan dar carta de naturaleza a una negociación política con ETA".

Por último, Mar Blanco ha asegurado que ningún representante del Gobierno o del PSOE ha acudido a la manifestación "porque han preferido hacer añicos el espíritu de Ermua y todo lo que representa para sentarse a negociar con quienes nos han amargado la vida durante tantos años".