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El Gobierno de España, con el presidente a la cabeza, se vuelca en las elecciones catalanas. "Tras esa enésima embestida de bloque contra bloque, Cataluña sigue bloqueada", indica Pedro Sánchez desde Tarragona. Salvador Illa es el favorito según el CIS. "Bajo diferentes siglas proclaman un mismo lema: todos contra Illa", explica el presidente y líder de los socialistas. Aunque las encuestas de la Generalitat dan la victoria al independentismo. "La Cataluña abierta se ha ido difuminando al mismo tiempo que aparecían las trincheras", reflexiona el candidato del PSC. "La única clave que sabemos que va a ser determinante es la participación", apunta Inés Arrimadas. "Si todos los que queremos un cambio vamos a votar, lo vamos a conseguir", animaba la presidenta de Ciudadanos. Y ante cualquier duda, solicitar, como ella, el voto por correo. El constitucionalista, en liza, también por su hegemonía, atizando al candidato socialista. "Que hay que hundir a Cataluña para ganarse el apoyo del independentismo", ha dicho la presidenta madrileña, invitada estrella hoy de la campaña del Partido Popular. "Es un delito en Cataluña, con el clima que tenéis, tener todo cerrado", sentenciaba Isabel Díaz Ayuso. Y que es el independentismo el que roba a la ciudadanía. "Y que si Cataluña ha perdido el liderazgo no es por un enemigo conspirativo externo, sino porque aquí se han hecho las cosas mal", afirmaba su candidato, Alejandro Fernández. Directamente en uno de los feudos del independentismo, en Girona, Vox. Se veía venir, recibidos por grupos antifascistas. Altercados, no. Pero tensión, toda. "Hemos empezado a recuperar Cataluña, porque frente a su proyecto de odio estamos nosotros aquí reivindicando la libertad", decía el candidato Ignacio Garriga en su intervención. Pero, en boca del presidente del partido, Santiago Abascal, sin olvidarse de Illa: "A ese ministrillo que ha condenado a los españoles y a todos los catalanes a la ruina y a los contagios masivos". Y estamos sólo al comienzo de la campaña.