Madrid es mucho más que la Gran Vía, el Bernabéu y la Puerta del Sol. Pese a que las principales rutas turísticas recorren una y otra vez los mismos lugares, la capital ofrece infinidad de rincones curiosos y extraños en los que descubrir un perfil diferente de una metrópoli siempre sorprendente.
Porque Madrid es una ciudad poliédrica que merece una mirada libre de prejuicios, os invitamos a descubrir una serie de lugares insólitos que se ocultan en la capital: es el otro Madrid.
Rincones curiosos de Madrid
Accidente Aéreo
“Quería hacer hincapié en la hostia, distanciarlo del Ángel Caído”. El escultor Miguel Ángel Ruiz puso mucho humor en esta singular escultura en una azotea frente al Mercado de San Miguel. La versión oficial dice que es una representación del mito de Ícaro, pero el artista prefiere una interpretación menos solemne: “un aviador distraído”.
En Madrid abundan las esculturas urbanas de solera, pero pocas son tan traviesas como el Accidente Aéreo. Aunque está cerca de cumplir 15 años, se trata de una obra que muchos madrileños todavía no han descubierto: y es que con tanta prisa se nos ha olvidado que, de vez en cuando, conviene mirar hacia arriba… por si un ángel se estampa contra la cornisa de un edificio.
La Caja de las Letras
El Instituto Cervantes de Madrid cobija una cámara acorazada con decenas de cajas de seguridad. Pero ya no guardan dinero ni joyas, sino legados culturales cedidos por algunos grandes artistas de habla hispana de las últimas décadas.
Al heredar el edificio del antiguo Banco Central, el Instituto Cervantes se encontró con una inexpugnable sala acorazada que servía para guardar importantes cantidades de dinero. Decidieron otorgar un valor simbólico al espacio y pidieron a grandes personalidades de las letras y las artes castellanas (o a sus herederos) que usaran estas cajas para custodiar sus legados hasta la fecha que ellos mismos eligieran: Gabriel García Márquez, Miguel Hernández o Alejandra Pizarnik ocupan algunas cajas de este insólito baluarte cultural. Porque, ¿hay algo más valioso que la cultura?
El Jardín del Príncipe de Anglona
Solo el rumor de las hojas altera el silencio de este refugio único en el barrio de La Latina. El centro de Madrid no es precisamente el espacio más sereno de la capital, así que el Jardín del Príncipe de Anglona es el lugar ideal para descansar un rato y cargar las pilas.
Creado a mediados del XVIII ha vivido varias restauraciones que, no obstante, han tratado de mantener el trazado original. Encerrado por altas tapias lindando con la Calle de Segovia y la Plaza de la Paja, este aislamiento ha convertido el Jardín del Príncipe de Anglona en uno de los lugares secretos más refrescantes de Madrid.
La Cabeza Colosal Olmeca
Hace 15 años, el Ensanche de Vallecas dio la bienvenida a una de las esculturas más insólitas de Madrid. Se trata de una cabeza gigante donada por el Estado de Veracruz en México de más de 2 metros de altura y cinco toneladas de peso que reproduce el modelo original que se exhibe en el Museo de la Antropología del D.F. Un recuerdo de la misteriosa cultura olmeca de la América precolombina al sur de Madrid. Y es que las rotondas siempre deparan grandes sorpresas…
La ‘playa’ de Madrid
Como cualquier gran ciudad de interior, Madrid siempre sentirá la nostalgia del mar… y la playa. Pero los capitalinos tenemos un trocito de playa en el insólito Restaurante Ojalá situado en Malasaña. Fue abierto en 2004, pero vivió una reinvención en 2014 ideada por el arquitecto Andrés Jaque: jardín colgante, luces de feria y un suelo de arena oculto en la zona inferior del restaurante. ¡Si hasta tiene un chiringuito playero!
La columna de la M30
Saliendo del túnel en dirección a Méndez Álvaro una columna exenta de orden jónico saluda a los atareados conductores que no están, generalmente, para muchas bromas. Tal vez por ello, los madrileños no tengan ni la más remota idea de qué pinta una columna en un arcén. Pues os lo contamos: se trata de un respiradero (artístico) de los colectores de la margen del Manzanares erigidos a principios del siglo XX. Para soñar la Antigua Grecia en medio del atasco.
‘Esta es una plaza’
En la calle Doctor Fourquet, entre cafés hipsters, bares castizos y decenas de galerías de arte, se oculta una plaza diferente que encarna a la perfección las mil caras de Lavapiés. Todo empezó en 2008 cuando nació un huerto urbano que finalmente se convirtió en asociación consiguiendo la cesión del espacio por parte del Ayuntamiento. Esta es una plaza es ahora un espacio autogestionado que ofrece talleres, biblioteca y muchas actividades para los más pequeños.
La ‘Casa de los Penes’
Calle Montserrat 12 cerca de Metro San Bernardo. El viandante se para ante la fachada y frunce el ceño. ¿Es eso lo que parece? Pues sí: una fachada con símbolos fálicos. Si la historia del arte está plagada de recreaciones de genitales humanos, ¿por qué no pueden decorar una fachada? Penes y vaginas decoran esta casa diseñada a principios del siglo XX por el arquitecto Arturo Pérez Merino para el promotor Luis Navarrete.
Los historiadores del arte no aciertan a explicar el objetivo que hay detrás de esos relieves sexuales. Hay quién dice que son símbolos masones mientras que otros apuntan a una broma por parte del arquitecto… ¿con la connivencia del promotor? Incluso pudo ser una apuesta celebrada bajo los efectos de la absenta. De ser así, el arquitecto cumplió su parte para regalar a los madrileños uno de los rincones más insólitos de la capital.