Además de los museos barceloneses imprescindibles, como el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Museo de Arte Moderno, el Museo Picasso o el Museo Egipcio, la Ciudad Condal también destaca por tener una serie de edificios espectaculares, que pueden visitarse, en los que el arte modernista alcanzó su máximo esplendor.
Si ya conoces las mejores casas museo madrileñas en las que viajar al pasado, hoy le toca el turno a otra de las grandes ciudades de nuestro país. Toma nota y apunta las casas museo que no puedes perderte en Barcelona.
Casa Museo Gaudí
La casa en la que habitó Gaudí entre los años 1906 1925 se convirtió en 1963 en la Casa Museo Gaudí (Park Güell, Ctra. del Carmel, 23A, 08013 Barcelona). En ella puedes contemplar una estupenda colección de piezas y mobiliario diseñada por el artista y por algunos de sus colaboradores, así como documentos y objetos personales.
El edificio se encuentra dentro del Parque Güell y puedes recorrerlo para descubrir el dormitorio de Gaudí y su estudio, entre otras estancias. Hay que tener en cuenta que las casi dos décadas que vivió en esta casa correspondieron a un tiempo en el que llevó a cabo sus obras de madurez, como la construcción de la Sagrada Familia.
Casa Batlló
Si visitas la Casa Museo Gaudí, no te pierdas tampoco la Casa Batlló (Passeig de Gràcia, 43, 08007 Barcelona), una de las más bonitas de las que reformó el famoso arquitecto y catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. La visita se ofrece por medio de una guía de realidad aumentada, así que la experiencia es única e irrepetible.
Casa Milá
La hermosa Casa Milá (Passeig de Gràcia, 92, 08008 Barcelona), conocida popularmente como La Pedrera, es uno de los edificios civiles barceloneses diseñado por Gaudí y, sin duda, uno de los más fotografiados. Fue el industrial Pere Milá y su mujer quienes le encargaron la construcción del edificio para alquilar las viviendas. La Casa Milá también es Patrimonio de la Humanidad y puede visitarse con audioguía, disfrutar de la azotea con una copa de cava o apuntarte a sus visitas especiales.
Casa Museo Amatller
Una de las casas museo más bonitas de Barcelona es la Casa Museo Amatller (Passeig de Gràcia, 41, 08007 Barcelona). Fue el chocolatero Antoni Amatller quien le encargó la reforma de esta vivienda al arquitecto Josep Puig i Cadafalch. En su interior todavía puede contemplarse la decoración original de principios de siglo XX, así como sus columnas, espectaculares lámparas, techos y suelos.
Por si eso fuera poco, también se exponen las obras de arte propiedad del industrial, que era un gran coleccionista, entre las que se encuentran un retablo del siglo XIII, colecciones de vidrio arqueológico y fotografías de Rogent, entre otras.
Casa Lleó i Morera
En el año 1902, Lluís Domènech i Montaner se encargó de rehabilitar un edificio de 1864 por encargo de Francesca Morera. Como resultado, la Casa Lleó i Morera (Passeig de Gràcia, 35, 08007 Barcelona) se convirtió en una de las casas más bellas de la zona y en su interior todavía se conservan los mosaicos romanos de Mario Maragaliano y Lluís Bru y las esculturas de Eusebi Arnau, entre otras.
Casa Felip
En el año 1901 se construyó otro de los edificios modernistas barceloneses que puedes ver: la Casa Felip (Carrer d’Ausiàs Marc, 20, 08010 Barcelona), obra del arquitecto Telm Fernández i Janot. Es posible visitar parte de ella, donde se encuentran las vidrieras más espectaculares. Debes reservar cita previa con Cases Singulars para poder hacerlo, ya que solo se ofrecen visitas guiadas.
Casa Terrades
Sin duda, la Casa Terrades (Avinguda Diagonal, 420, 08037 Barcelona) es una de las ineludibles. La belleza de este edificio, más conocido como la Casa de les Punxes, con sus torres cilíndricas, fue obra de Puig i Cadafalch, y en su fachada destaca la imagen de Sant Jordi matando al dragón. Puede visitarse de forma libre, guiada e incluso tomarse una copa de cava.
Debido a la situación actual, te recomendamos que te informes en la web de cada una de ellas o en las oficinas de turismo sobre los horarios de apertura o posibles cierres de estas casas museo, ya que pueden ser objeto de cambios o modificaciones.