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Cartel promocional de la serie 'Serrines'. Foto: Mediaset.
Cartel promocional de la serie 'Serrines'. Foto: Mediaset.
Antonio Resines, en el papel de su alterego 'Serrines'. Foto: Mediaset
Antonio Resines, en el papel de su alterego 'Serrines'. Foto: Mediaset

‘Serrines’: Antonio Resines se autoparodia

Mediaset ha presentado en el South International Series Festival una comedia que se inspira en la carrera interpretativa del intérprete protagonista. El formato, que llegará a Prime Video a principios de 2024, sumerge al espectador en un juego de metaficción con tintes macarras que recuerdan al precedente de David Trueba con Jorge Sanz.

Aurora Muñoz

¿Qué fue de Jorge Sanz? Tanto si el público se hacía esa pregunta, como si no; David Trueba vino a responderla en 2010 con una miniserie producida y emitida por Canal+ con la que rompió todos los límites de la ficción convencional. El proyecto nació cuando al candidato en seis ocasiones al Premio Goya y ganador de uno por su papel en Si te dicen que caí le propusieron protagonizar una serie de televisión, en un momento en el que todo lo que no fuese trabajar en el cine parecía un plan B. Sanz le preguntó entonces a su amigo Trueba si debería aceptar el proyecto y, entre bromas, le respondió que la mejor elección era interpretarse a sí mismo. Los dos estaban sin trabajo y aquello se convirtió en un órdago.

Tras aquella conversación, casi de barra de bar, Trueba realizó el diseño de la producción y lo presentó. La idea de contar a un Jorge Sanz ficcionado y venido a menos no gustó en los despachos, pero la pareja de amigos no se vino abajo y comenzaron a rodar el piloto con sus propios medios. Les bastó una pequeña cámara y escenarios naturales donde ni siquiera cortaron al tránsito para el rodaje. El objetivo era parecer realistas, aunque fuese a costa de perder calidad de sonido y de iluminación. Esa estética imperfecta, casi sucia, era parte del encanto del proyecto que habían imaginado.

Todos los episodios arrancan con Jorge Sanz despertándose en cualquier lugar por una llamada de teléfono. No puede permitirse no descolgar. Su personaje está atravesando la crisis de los 40 y un bache en su carrera que, tras casi dos décadas de esplendor, empieza a convertirse en un verdadero socavón. Ese patetismo hizo reír a los espectadores que, en paralelo, empatizaban de una manera más profunda con el eterno drama de las estrellas caídas. El actor de Belle Époque ha reconocido que se basaron en experiencias reales como una ocasión en la que, durante una actuación, una mujer le gritó: «Ooooh, se ha hecho mayor».

‘Los Tocino’ y otros clásicos reconocibles

Antonio Resines SIEMPRE ha sido mayor… Al menos, para una generación entera. La mayoría de los millennials desconocen que fue presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España (2015-2016) y ganador de un premio Goya por su papel en La buena estrella. La amenaza de la escobilla de Diego, su personaje en Los Serrano, ya forma parte del imaginario colectivo y parece imposible que pueda desligarse del propio Resines.  «A los jóvenes cualquier chorrada les hace gracia (…) En el fondo, lo que hace gracia es que señores mayores hagamos chorradas», comentaba en una charla con Mercedes Milá en el programa Milá vs. Milá, de Movistar Plus+.

El refran dice que, si no puedes vencer al enemigo, lo mejor es unirte a él y hace ya rato que Resines decidió reírse de sí mismo. En La Resistencia juega con David Broncano a reforzar su imagen pesetera y finge estar desubicado entre las nuevas generaciones, pero resulta evidente que, si realmente lo estuviera, jamás habría pisado ese show. La partida comenzó mucho tiempo atrás, precisamente en la autoparodia de Jorge Sanz, en la que figuraba como un habitual en el reparto. Ahora es el niño prodigio de La Miel quien le da la réplica en un formato similar, pero no idéntico. «Bienvenidos a una macarrada», dijo Resines para abrir boca después de la proyección de los dos primeros episodios de Serrines en South International Series Festival. «Es una comedia que, aunque parezca mentira, se me ocurre a mí y, aunque parezca mentira, el cambio del apellido marca distancias», añadió.

​El alter ego de Antonio Resines en esta serie es «un tipejo» como él mismo define. En el ocaso de su carrera, Serrines ha hecho más dinero que la mayoría de los actores de su generación. La gente le reconoce por la calle y no le faltan ofertas de trabajo, pero hay algo que echa en falta: el prestigio. Puede que el motivo de que no lo haya conseguido tenga mucho que ver con aceptar papeles en series de televisión de dudoso gusto y campañas de publicidad de productos de segunda línea. Estas decisiones lo han convertido el hazmerreír de la crítica. ¿Les suena el planteamiento?

El actor de Torrelavega no teme que la audiencia derribe las barreras entre personaje e intérprete. «Se parece a la vida real pero muy exagerada», ha resumido Jorge Sanz, que en este formato se mete en la piel de Roque Madrazo, un actor secundario que ejerce de fiel escudero del protagonista. De hecho, la serie camina sobre el alambre y abunda en el intento de alimentar la confusión con líneas de guion donde todo el mundo recuerda a Serrines la mítica frase «Queco, que te meto» del protagonista que le valió el éxito en una popular serie bautizada como Los Tocino. A partir de ahí, el despropósito se agranda a dimensiones que invitan al espectador a alejarse del verdadero actor de Los Serrano. «Nos metemos con todo el mundo, pero siempre con nosotros primero», ha querido puntualizar Resines.

El director Jaime Botella ha comentado que la serie no se separa del género documental, pero se maneja en la ambigüedad y ha invitado a la audiencia a desentrañar hasta dónde llega la realidad. No queda mucho para que podamos jugar a las siete diferencias. Esta comedia de Mediaset España producida por Producciones Mandarina que se estrenará a principios de 2024 en exclusiva en Prime Vídeo y dejan abierto el camino a que pueda emitirse en Telecinco en capítulos de 25 minutos.